San Antolín

Dios nunca abandona a su pueblo. Así lo expresa la Escritura, y así les pasó en España a las primitivas generaciones en ese salto del paganismo a la Fe. Una realidad con la que se encontró el propio Apóstol Santiago cuando llegó por primera vez a estas tierras y que tuvo que deshacer con el Patronazgo de la Virgen. Hoy conmemoramos a San Antolín de Amiens, quien vivió ese paso.

La tradición le sitúa como un artesano encargado de realizar tallados de piedra. Su enfado con los adoradores de dioses paganos en la ciudad le obligan a marcharse, encontrando un ermitaño que le acoge. No es la única vez que pasa esto porque en los Hechos de los Apóstoles los orfebres oragnizan una revuleta contra San Pablo.

El santoral de hoy, jueves 2 de septiembre

En el caso de Antolín, cuando retorna a la urbe contempla cómo se había incrementado la adoración a los dioses, lo cual le provoca un gran malestar hasta el punto de que destruye muchos de esos ídolos. Por ello debe huir con más urgencia que la vez anterior. En este momento el obispo le encarga que levante una Iglesia, lo que le cuesta que los enemigos de la Fe y de él, le asesinen. Sus reliquias martiriales llegaron a Palencia. La Providencia quiso que fuese el rey Don Sancho quien las encontrase.

Los acontecimientos tuvieron lugar de la siguiente manera: Durante una cacería persiguió a un jabalí hasta una cueva. Allí le encontró y cuando le iba a dispar una flecha se le paralizó la mano. El monarca que no daba crédito, hasta que, entendiendo que pisaba lugar sagrado, se prometió edificar un templo allí si se curaba, petición que se cumplió totalmente, por lo que Don Sancho realizó lo prometido. De ahí surge la Catedral de palentina dedicada a San Antolín, Patrono de la ciudad.