Encerrados, con hambre y sin techo: las condiciones infrahumanas en la que los cardenales eligieron al Papa Gregorio X
Aquella elección dio lugar al término cónclave ('con llave') y a una profunda reforma en el proceso de elección de un Pontífice tras casi tres años de deliberaciones

Gregorio X
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El cónclave que eligió a Gregorio X es recordado como el más largo en la historia de la Iglesia Católica. Se celebró entre entre los años 1268 y 1271. Es decir, durante casi tres años, hubo sede vacante debido a las intensas disputas políticas entre las facciones cardenalicias, lo que llevó a medidas extremas para forzar una decisión que desbloquease esta situación inédita en la Iglesia Católica.
Un interregno de casi tres años
Tras la muerte del Papa Clemente IV el 29 de noviembre de 1268 en la localidad italiana de Viterbo, se inició un periodo de sede vacante que se prolongaría por 34 meses. El Colegio Cardenalicio, compuesto por 19 miembros, se dividió en dos facciones bien diferenciadas: una de ellas apoyaba los intereses de los franceses, influenciada por Carlos de Anjou, mientras que la otra representaba los intereses italianos. Esta polarización impidió alcanzar el consenso necesario de dos tercios para elegir a un nuevo Pontífice.
La prolongada falta de acuerdo generó una gran frustración tanto dentro como fuera del cónclave. En 1270, el gobernador de Viterbo, harto de la situación, tomó medidas drásticas: encerró a los cardenales en el palacio episcopal, redujo sus raciones de comida y, según algunas fuentes de la época, incluso retiró el techo del edificio para exponerlos a las inclemencias del tiempo. Estas acciones dieron origen al término "cónclave", derivado del latín 'cum clavis' (con llave), haciendo referencia al encierro forzado de los cardenales.
Los cardenales elegieron como Papa a un archidiácono
Ante la imposibilidad de alcanzar un consenso, los cardenales acordaron delegar la elección en un comité de seis miembros, quienes finalmente eligieron a Teobaldo Visconti, un archidiácono de Lieja que ni siquiera era cardenal ni sacerdote en ese momento.
El Papa Visconti se encontraba en Tierra Santa acompañando al príncipe Eduardo de Inglaterra cuando fue informado de su elección. Inició su viaje de regreso el 19 de noviembre de 1271 y llegó a Viterbo el 12 de febrero de 1272, donde aceptó el Papado y adoptó el nombre de Gregorio X.

Cuatro estudios pictóricos masculinos. (De izquierda a derecha: el papa Gregorio Magno, san Jerónimo, un hombre barbudo de frente y un joven), Giuseppe Cesari, llamado Cavaliere d' Arpino (Arpino, 1568-1640, Roma).
Reformas para evitar que se repitiese lo sucedido con Gregorio X
Consciente de los problemas que había causado la prolongada elección, Gregorio X implementó reformas significativas para evitar situaciones similares en el futuro. En el Concilio de Lyon en 1274, promulgó la constitución apostólica 'Ubi periculum', que establecía normas estrictas para los cónclaves: los cardenales debían reunirse en la ciudad donde falleció el Papa anterior, permanecer incomunicados hasta elegir un sucesor y enfrentar restricciones alimentarias si la elección se prolongaba. Estas medidas buscaban acelerar el proceso y reducir las influencias externas.
Aunque 'Ubi periculum' fue suspendida temporalmente por algunos de sus sucesores, sus principios fundamentales perduraron y sentaron las bases para los procedimientos de elección papal que se siguen utilizando en la actualidad.
Por tanto, el cónclave que eligió a Gregorio X no solo destaca por su duración, sino también por las lecciones que dejó sobre la necesidad de estructuras claras y reglas estrictas en procesos de toma de decisiones tan cruciales para la Iglesia Católica.