Un mes de la masacre contra los cristianos en Nigeria: la medida para que el país no sea un estado terrorista

El Domingo de Pentecostés el terrorismo yihadista irrumpió durante la Misa de la iglesia San Francisco Javier de Owo, dejando cuarenta víctimas mortales y más de ochenta heridos

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Cuando se ha cumplido un mes desde que la comunidad cristiana de Nigeria sufriera uno de los mayores ataques, el obispo de Ondo, Jude Ayodeji, ha calificado aquel atentado como un “acto de genocidio”.

Fue el 5 de junio, Domingo de Pentecostés, cuando buena parte de los fieles que asistieron a la Santa Misa de la parroquia de San Francisco Javier de Owo vieron truncadas sus vidas por estos ataques. Concretamente perdieron su vida al menos cuarenta personas, a lo que se suman más de ochenta heridos.

Según Jude Ayodeji, “las señales apuntan a que la masacre de Pentecostés fue llevada a cabo por pastores militantes islamistas fulani, aunque el gobierno nigeriano aún tiene que identificar formalmente a los terroristas”.

En una entrevista concedida a Ayuda a la Iglesia Necesitada, el obispo de Ondo ha revelado que recientemente viajó a EEUU en el marco de la 'II Cumbre Internacional de Libertad Religiosa' para reclamar justicia por los cristianos perseguidos en su país: “Se necesita una acción inmediata para combatir la inseguridad en Nigeria”, expresó en la charla.

Durante el encuentro internacional, el excongresista estadounidense Frank Wolf, pidió el nombramiento de un enviado especial para Nigeria o la región del lago Chad, con legisladores especialmente enfocados en las necesidades del país y la región.

Ese enviado, precisó Wolf, necesitaría tener influencia real, con acceso al Departamento de Estado y la capacidad de aprovechar el poder de la ONU y otras instituciones.

“A menos que se tomen medidas significativas, Nigeria corre el riesgo de convertirse en un estado terrorista o en un estado fallido”, agregó durante la cumbre que fue copresidida por el embajador Sam Brownback, ex embajador general de Estados Unidos para la Libertad Religiosa Internacional; y Katrina Lantos Swett, expresidenta de la Comisión de los Estados Unidos para la Libertad Religiosa Internacional.

Cabe recordar que Nigeria se ha convertido en uno de los territorios más peligrosos del planeta, donde la acción yihadista ha hecho que profesar la religión cristiana sea motivo de muerte y tortura. Esta semana, sin ir más lejos, fue secuestrado el Padre Peter Amodu o atacaron la residencia del reverendo Daniel Umaru por un grupo armado que mató a dos de sus hijos y raptaron a su hija de trece años. El pastor fue herido de gravedad.

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