José Vicente Nácher, arzobispo electo de Tegucigalpa: "Voy con actitud de servicio"

El sacerdote valenciano, que releva en la sede al cardenal Rodríguez Maradiaga, reconoce que el nombramiento "nos ha sorprendido a todos"

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Sorprendido y agradecido. Así se confiesa el sacerdote valenciano José Vicente Nácher Tatay tras su nombramiento este jueves 26 de enero como nuevo arzobispo de Tegucigalpa. "Agradezco mucho al Santo Padre por este nombramiento y voy a contactarme ahora con el señor Cardenal, con la arquidiócesis, con los sacerdotes, y estamos en disposición para ir a servir, a unirnos en el caminar del pueblo de Dios, en la arquidiócesis de Tegucigalpa", afirma en declaraciones al diario La Prensa.

"A cada uno de los sacerdotes, a cada uno de los fieles, pues decirles que los quiero mucho y que voy con actitud de servicio", añade.

El Padre Nácher fue el elegido este jueves por el Papa Francisco para el gobierno pastoral de la única archidiócesis de Honduras. Junto a él fue elegido también un nuevo obispo para San Pedro Sula — tras la aceptación de la renuncia del también español Ángel Garachana, de 78 años — en la persona de monseñor Michael Leniham (obispo hasta ahora de La Ceiba), y creada la provincia eclesiástica de San Pedro Sula. Además, el obispo auxiliar de Tegucigalpa, Teodoro Gómez Rivera, fue elegido obispo residencial de Choluteca.

Un pastor joven

Se trata de una remodelación eclesial en toda regla en el pequeño país centroamericano… y una remodelación de futuro, pues el nuevo arzobispo, la persona en la que se ha fijado el Santo Padre para liderar esta Iglesia particular, tiene solo 59 años. Misionero Paúl, Nácher era actualmente el párroco de San Vicente de Paúl en San Pedro Sula, la segunda ciudad del país, y superior regional de la Congregación de la Misión en Honduras.

No es habitual que un sacerdote sea nombrado directamente para una sede arzobispal, pero tampoco es la primera vez que el Papa Francisco hace una designación de esta naturaleza. El actual arzobispo de Lima, por ejemplo, Carlos Castillo Mattasoglio, tampoco era obispo cuando el Santo Padre se fijó en él para reemplazar al cardenal Cipriani en la capital de Perú.

"A todos nos ha sorprendido el nombramiento, pero así es el Señor, que siempre va por delante. Esta es una acción del Señor y lo bonito es que estamos todos juntos y seguiremos así", ha dicho el arzobispo electo.

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