VÍDEO | Jóvenes de todo el mundo se vuelcan con la canonización de Pablo VI

Cientos de jóvenes han querido estar presentes en la canonización de un Papa al que no han conocido pero al que admiran

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Cientos de jóvenes de todo el mundo han llegado estos días a Roma para presenciar la cononización que tanto tiempo llevaban esperando del Papa Pablo VI. Todos ellos han podido asisitir a una multitudinaria ceremonia en la Plaza de San Pedro, en la que también se ha canonizado  al arzobispo de San Salvador, Oscar Romero.

La corresponsal de COPE en Roma, Eva Fernández, se ha encontrado con uno de estos grupos de españoles que no puede contener su emoción. "Quieren estar presentes en la canonización de un Papa al que no han conocido pero al que admiran", señala.

“Venimos de todas partes de España, de Cataluña, Córdoba, Toledo, Madrid y Lérida. Estamos contentos de asistir”, aseguraban a la Cadena COPE momentos antes de la canonización.

 

Todos ellos pudieron escuchar  la formula en latín empleada por el Papa Francisco para proclamar la santidad del Papa y pedir que fuese inscrito en los libros de los santos de la Iglesia. "Después de haber reflexionado largamente e invocado la ayuda divina, y escuchando el parecer de muchos de nuestros hermanos obispos, declaramos santos a los beatos..." Y continuó: "Y les inscribimos en el Catálogo de los Santos, y establecemos que en toda la Iglesia sean devotamente honrados entre los santos".

La proclamación de la santidad fue recibida con un gran aplauso en la Plaza de San Pedro donde se congregaron cerca de 70.000 personas.

El Papa, recordado por haber concluido el Concilio Vaticano II, había sido beatificado por el papa argentino el 19 de octubre de 2014 en una misa que fue la ceremonia de clausura del Sínodo extraordinario sobre la familia, y ahora la canonización se produce mientras se celebra la asamblea de los obispos sobre los jóvenes.

En la ceremonia se encontraba la familia, que ha sido protagonista del milagro reconocido para que Pablo VI pudiera ser proclamado santo. El milagro aceptado fue el de Amanda, una niña nacida el 25 de diciembre de 2014 en Verona (Italia), con apenas 24 semanas de gestación, pero que sobrevivió.

Durante la ceremonia de hoy también se ha canonizado a la que es considerada la primera santa boliviana, aunque nacida en Madrid (España), Nazaria Ignacia March; los sacerdotes italianos Francesco Spinelli, Vincenzo Romano y el laico Nunzio Sulprizio y de religiosa alemana María Katharina Kasper.

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