La reivindicación de poner el Belén y presumir de ello: «Tenemos que sacudirnos los complejos»

A las puertas de la Navidad, una campaña surgida en la Diócesis de Ávila cumple su décimo aniversario con un propósito claro: animar a los ciudadanos no solo a mantener viva la tradición de poner el belén en casa, sino también a mostrarlo con orgullo en el espacio digital. La iniciativa 'Yo pongo el belén' ha vuelto un año más, y con más fuerza si cabe, para reivindicar el sentido cristiano de estas fechas. Así lo ha explicado Auxi Rueda, delegada de medios de la diócesis abulense, en el programa 'Ecclesia al Día' de TRECE, presentado por Raquel Caldas.

Compartir fe, cultura y tradición

El objetivo de la campaña va más allá de la simple decoración. Se trata de una invitación a "compartir tradición, fe y cultura", como ha señalado Auxi Rueda. En un entorno digital a menudo saturado de contenidos superficiales, la iniciativa busca aprovechar el poder de conexión de las redes sociales para un fin más profundo. "A través de las redes sociales compartimos muchísimas cosas, la gran mayoría, el 90 por 100, muy banales, y era una manera de decir, bueno, pues las redes también nos sirven para entrelazar a unas personas con otras a través también, en este caso, de la fe", ha afirmado la delegada de medios.

La propuesta es sencilla: que cada familia, parroquia o comunidad que monta su belén, sin importar su tamaño o estilo, comparta una fotografía en sus perfiles sociales. El fin es crear un mosaico virtual que muestre las diferentes maneras de vivir la Navidad con un mismo arraigo: "demostrar el nacimiento de Jesús". Esta llamada a la acción ha tenido una respuesta masiva a lo largo de los años, con la llegada de imágenes de belenes "de todo tipo, desde el más original que hayas podido ver y luego belenes clásicos que hemos tenido todos por casa toda la vida", ha comentado Rueda.

Una tradición frente a las modas importadas

La campaña también se ha erigido como un baluarte de las costumbres españolas frente a la creciente influencia de tradiciones foráneas. Auxi Rueda ha expresado su preocupación por cómo se importan modas ajenas a nuestra cultura, como "los elfos estos famosos", mientras se arrinconan símbolos con un profundo significado histórico y espiritual. "No nos damos cuenta de que la tradición cristiana belenística, la que nos trajo el propio San Francisco, pues tiene una riqueza que es impresionante y que debemos conservar", ha defendido. Por ello, la iniciativa quiere ser también "una reivindicación de que esto es lo nuestro".

El mensaje principal es claro: hay que dejar atrás cualquier tipo de reparo a la hora de manifestar la fe públicamente. "Tenemos que sacudirnos los complejos y las redes yo creo que nos pueden ayudar mucho a ello", ha sentenciado Rueda. En su intervención, ha cuestionado por qué se exhibe con naturalidad un árbol de Navidad decorado y, en cambio, puede existir cierta reticencia a hacer lo mismo con el belén. "Si mostramos un árbol de Navidad que nos ha quedado muy bonito [...], ¿por qué no vamos a mostrar los belenes?", ha reflexionado, animando a celebrar sin complejos la esencia de la Navidad.

Creatividad y arraigo en los hogares españoles

La creatividad es uno de los sellos distintivos de los belenes que participan en la campaña. Al ser preguntada por el más original que recuerda, Rueda no ha dudado en mencionar uno que le impactó en los primeros años: "Tengo la imagen todavía de un belén que estaba hecho en una hogaza de pan, y estaba construido con la miga. Era un misterio precioso". Ha relatado cómo el autor le explicó el minucioso trabajo para dar forma a las figuras, un ejemplo del cariño y la dedicación que miles de personas invierten en esta tradición.

Otro aspecto curioso que ha desvelado la campaña es una costumbre española muy extendida entre los españoles. A pesar de que la tradición indica que la cuna debe permanecer vacía hasta la medianoche del 24 de diciembre, la realidad es otra. "No me he encontrado ningún Belén que venga la cuna o al pesebre vacío. [...] Yo misma también siempre cuando me encargo de ponerlo, siempre va el niño en la cuna", ha confesado Rueda, confirmando que la inmensa mayoría de los belenes que recibe ya incluyen la figura del Niño Jesús desde el primer día.

El debate sobre la presencia de símbolos religiosos en el espacio público también ha formado parte de la conversación en 'Ecclesia al Día'. Los presentadores han recordado las polémicas de años anteriores sobre la instalación de belenes en edificios institucionales, una controversia que parece haberse atenuado. En este contexto, se ha mencionado el discurso de la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, en defensa del belén como símbolo de los valores que fundan la civilización occidental, como "la sacralidad de la vida" y "la solidaridad".

Finalmente, los colaboradores del programa han coincidido en que en España "no hay polémica" actualmente y que la presencia del belén "se vive con naturalidad". Se ha destacado que miles de personas visitan los nacimientos instalados en lugares públicos, y se ha insistido en el mensaje de fondo: más allá de las fiestas y las comidas, "lo que celebramos en Navidad es el nacimiento de Jesús, que Dios se hizo hombre". Una verdad que la campaña 'Yo pongo el belén' ayuda a recordar cada año.