Omella advierte que 4 de cada 10 españoles no podrán irse de vacaciones: "Repartamos para que otros puedan"

El elevado ritmo de vacunación permite a sectores como el turismo respirar y encarar con mayor optimismo el futuro más próximo

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Si bien es cierto que la economía española ha comenzado a reactivarse gracias a la recuperación de la actividad, no es menos cierto que la pandemia ha dejado una aguda crisis económica que no se conocía desde la Guerra Civil Española en la década de los años treinta.

El elevado ritmo de vacunación permite a sectores como el turismo respirar y encarar con mayor optimismo el futuro más próximo, pero no podemos olvidar que la covid-19 ha dejado a muchas familias atrás, sin nada. No en vano el confinamiento de marzo de 2020 propició que más de tres millones de trabajadores estuvieran en ERTE, mientras que más de un millón de personas perdió su puesto de trabajo.

Como decimos, el optimismo se ha apoderado de nuestro estado de ánimo, máxime teniendo en cuenta que el próximo sábado, 26 de junio, dejará de ser obligatorio llevar las mascarillas en el exterior, tal y como comunicó el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. A ello se suman las millones de familias que están planeando sus vacaciones para estos meses de verano.

Pero no todos tendrán esa suerte, tal y como ha alertado el presidente de la Conferencia Episcopal Española, el cardenal Juan José Omella, quien en su cuenta de Twitter ha recordado que cuatro de cada diez españoles no podrán irse ni siquiera “una semana de vacaciones” debido a su precaria situación económica.

Así las cosas, el Arzobispo de Barcelona ha concienciado a las personas que sí podrán disfrutar de unos días de descanso de que son verdaderos “afortunados”, e insta a la sociedad a repartir “para que otros también puedan” irse de vacaciones.




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