Fallece a los 83 años Josep Alegre, abad emérito del Monasterio de Poblet

Su servicio abacial a la comunidad estuvo marcado por la discreción y la sencillez, con especial preocupación por la formación de las nuevas vocaciones

Europa Press

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El abad emérito del Monasterio de Poblet (Tarragona) Josep Alegre ha fallecido a los 83 años después de una "corta e inesperada" enfermedad, informa el monasterio en un comunicado este viernes. Alegre (Ballobar, Huesca, 1940) era monje desde hace 27 años, sacerdote desde hace 53 y fue abad de 1998 a 2015.

José Alegre Vilas nació en Ballobar (Bajo Cinca) el 8 de noviembre de 1940. Estudió la carrera de maestro. El 18 de marzo de 1970 fue ordenado presbítero, cursados los estudios pertinentes en el seminario de Zaragoza. Después de veinticinco años de ministerio como cura diocesano, ingresó en nuestro monasterio de Poblet.



Corría el año 1995, y el abad de Poblet, el Padre Mauro Esteva, acababa de ser elegido abad general de la Orden Cisterciense. No podía imaginar que, en menos de tres años, le sucedería como abad del monasterio. En efecto, el 26 de enero de 1996 vistió el hábito de novicio, y profesó el 25 de enero del año siguiente. El 20 de abril de 1998, siendo todavía profeso de votos temporales, fue postulado como abad por la comunidad de Poblet. Obtenidas las dispensas pertinentes de la Santa Sede, fue confirmado e instalado en el cargo el mismo día por su predecesor, el P. Mauro Esteva, que presidía la elección. Recibió la bendición abacial el 27 de junio siguiente de manos del arzobispo de Tarragona Luis Martínez Sistach.

Mientras ocurría todo esto, cursaba estudios de monástica en Roma y se licenciaba también en teología por el Instituto de Teología Fundamental de Sant Cugat del Vallés con una tesina sobre Guillermo de Saint-Thierry.

Real Monasterio de Santa Maria de Poblet doorway, Spain

D2H9CR Real Monasterio de Santa Maria de Poblet doorway, Spain

Su servicio abacial a la comunidad estuvo marcado por la discreción y la sencillez, con especial preocupación por la formación de las nuevas vocaciones que, en aquellos años, fluían al monasterio. Tuvo interés en revitalizar la Hermandad del monasterio abriéndola más hacia una vivencia espiritual en el surco de la Regla de san Benito. A través de sus escritos, mencionamos tan sólo los comentarios a las antífonas de la O, que publicaba cada año, compartía con muchas personas su búsqueda de Dios. Para los monjes, sus comentarios en la sala capitular y sus homilías eran expresión de aquella levadura de justicia divina que, según san Benito, deben difundir los mandamientos y la doctrina del abad (cf. RB 2,5).

El día 3 de diciembre de 2015, después de presentar la renuncia preceptiva por motivos de edad, fue sucedido en el cargo de abad de Poblet por el P. Octavi Vilá Mayo. El P. José ha vivido casi diez años como abad emérito fiel a su ideal monástico de servicio a la comunidad, de discreción y de silencio, de generosa fidelidad a la oración, personal y litúrgica, disponible y activo en los servicios sencillos de cada día. Hasta el último momento, hasta que, de forma inesperada y repentina, la enfermedad nos lo ha arrebatado. Dos días antes de su muerte, el 24 de enero, al atardecer, recibió la santa unción y el viático de manos de su amigo y cardenal, Juan José Omella, arzobispo de Barcelona, rodeado de toda la comunidad.

Fallece a los 83 años Josep Alegre, abad emérito del Monasterio de Poblet

El abad emérito del Monasterio de Poblet (Tarragona) Josep Alegre

Ahora que nos sentimos tan desamparados, cabe evocar unas palabras suyas: «Nosotros conocemos profundamente estas piedras de Poblet. Más aún: yo diría que somos piedras vivas, piedras de calidad. Pero hemos de trabajar con inteligencia, con corazón sobre todo; más aún: con fe, con profunda fe, para ensamblarnos unos a otros en la edificación del templo de piedras vivas. Todos tenemos necesidad en este levantamiento, piedra sobre piedra, de la comunidad, del templo vivo, de pulir muchas aristas, para que las piedras estén bien compactas entre sí. Esta es nuestra tarea de cada día» (Homilía en la Dedicación de Iglesia de 2010).

El Padre Alegre, una piedra preciosa que ahora ya forma parte del templo de la Jerusalén del cielo. Y para nosotros, todavía, la tarea de pulir las aristas del templo de la tierra, de esta iglesia peregrina de Poblet. Que él, que en vida nos edificó con su ejemplo, nos ayude ahora a ser buenos cortadores de piedra y hábiles constructores para formar un armonioso conjunto. Amén. En paz descanse.

El lunes a las 10 se oficiará la misa y el entierro de Alegre, que el miércoles recibió la santa unción y el viático de manos del cardenal arzobispo de Barcelona, Juan José Omella.

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