El cardenal Cobo, en la Almudena: "Necesitamos desarmar las palabras"

Madrid ha celebrado este 9 de noviembre la solemnidad de su patrona, la Virgen de la Almudena, con la tradicional misa en la explanada de la catedral. La celebración ha estado presidida por el cardenal arzobispo de Madrid, José Cobo, y ha contado con la renovación del Voto de la Villa por parte del alcalde, José Luis Martínez-Almeida. La jornada ha estado marcada también por la indisposición de la presidenta de la Comunidad, Isabel Díaz Ayuso, quien tuvo que ser trasladada a un hospital tras sentirse mareada durante la eucaristía.

El tradicional Voto de la Villa

Fiel a la tradición que se remonta a 1646, el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha renovado el Voto de la Villa. Antes de pedir, el alcalde ha querido “sencillamente dar las gracias” a la patrona por su “maternal protección” a lo largo de la historia de la ciudad. Ha agradecido que, en medio de tragedias, los madrileños hayan sabido “encontrar nuevos motivos para esforzarnos, para ponernos en pie, para seguir trabajando”.

En su discurso, Almeida ha pedido a la virgen que “guardes a las familias madrileñas, primera escuela del amor” y que “nos libréis de disputas estériles que nos hacen malgastar nuestras energías”. También ha rogado por la atención “a las necesidades de los más débiles y desfavorecidos” y ha pedido amparo para la Familia Real. Finalmente, ha concluido pidiendo que a los gobernantes les sea recordado “el valor de la verdad”, en consonancia con la enseñanza de su hijo: “la verdad os hará libres”.

“Una iglesia amable que no conoce enemigos”

El cardenal José Cobo ha centrado su homilía en la necesidad de encontrar una “alegría verdadera” que permita avanzar no solo en los días amables, sino también “en las horas de tormenta y de cruz”. Ha criticado las versiones superficiales de la felicidad, como las que se exhiben en redes sociales. “La alegría no es un bienestar barato ni un júbilo pasajero ni una foto de Instagram”, ha afirmado el arzobispo, destacando que es algo “mucho más profundo”.

La alegría no es un bienestar barato ni un júbilo pasajero ni una foto de Instagram”

El arzobispo ha señalado las “cruces de nuestro Madrid” que convocan a los cristianos, mencionando “el sufrimiento de las nuevas formas de pobreza”, el “incremento de la pobreza infantil”, la “pérdida de sentido de la vida en los jóvenes”, la “dificultad para acceder a una vivienda digna” y las “crecientes trabas a los migrantes”. Ante estos desafíos, ha afirmado que no valen “ni los gritos ni los reproches”, sino “conmoverse y aprender”.

En este sentido, ha hecho un llamamiento a “cultivar la amistad y la cordialidad como actitudes básicas y necesarias para la convivencia” en todos los ámbitos. “Tenemos que desarmar, y digo desarmar las palabras, también en nuestros medios de comunicación y redes”, ha exhortado el cardenal. Su deseo es, ha dicho, ser “una iglesia amable, que no pone límites al amor, que no conoce enemigos a los que combatir, sino solo hombres y mujeres a los que amar”.

Tenemos que desarmar, y digo desarmar las palabras”

Las palabras del cardenal para COPE

Al finalizar la eucaristía, y en declaraciones exclusivas al micrófono de COPE, el cardenal Cobo ha insistido en su mensaje, afirmando que a los cristianos les falta “crecer en amabilidad y mirar las cosas también de otra manera”. Ha añadido que la Virgen “tiene una capacidad de dar esperanza en estos tiempos que todos lo detectamos”.

Sobre la presidenta Isabel Díaz Ayuso, se ha sabido que llevaba un par de días indispuesta, motivo por el cual canceló un viaje a Sevilla. A pesar de sentirse mejor, acudió a la misa, pero sufrió un mareo. Una unidad del SUMMA 112 la ha revisado y ha decidido su traslado a un hospital para realizarle pruebas por precaución, aunque todo apunta a un virus estomacal. La celebración ha concluido con la tradicional procesión de la imagen de la Virgen por las calles del centro de Madrid.