El lío con Eritrea que ha permitido a dos grandes potencias africanas seguir peleando por jugar el Mundial y deja fuera a dos cenicientas

Marruecos, en sede aún por definir, albergará los encuentros que definirán el equipo de África que participe en el torneo de repesca intercontinental clasificatorio para el Mundial 2026. Según ha decidido la Confederación Africana de Fútbol (CAF), los cuatro equipos que luchen por este objetivo se enfrentarán en dos eliminatorias el jueves 13 de noviembre y la final será el domingo 16.

Esta última ronda de la CAF la disputarán los cuatro mejores segundos de los nueve grupos clasificatorios: Gabón, Camerún, Nigeria y República del Congo. Los cruces se deciden según el ránking de la FIFA de octubre y serán: Gabón-Nigeria y República del Congo-Camerún. Se ha quedado fuera de los mismos con 21 puntos y habiendo perdido un solo partido en todas las eliminatorias Burkina Faso. La razón hay que buscarla en la retirada de Eritrea.

Y es que tras la renuncia de este país se les han tenido que quitar los puntos obtenidos ante el colista de sus grupos a las 9 selecciones que habían quedado segundas. Una decisión que ha beneficiado a Nigeria que se hubiera quedado fuera de la repesca y que le ha quitado su puesto a Burkina Faso. Además, si Niger hubiera disputado sus dos partidos ante Eritrea y los hubiera ganado, la que se habría quedado sin Mundial habría sido Camerún. Toda una carambola.

Eritrea se tuvo que retirar de la competición porque cada partido internacional suponía una desbandada de jugadores. Estos escapaban de la concentración y pedían asilo político en el país en cuestión. Para evitar más problemas y viendo que no tenían opciones de meterse en el Mundial decidieron renunciar.