En la sesión de investidura de Pedro Sánchez salió a relucir la situación en Venezuela. Precisamente hoy se cumplen seis meses desde que Juan Guaidó jurara como presidente interino de Venezuela, era el presidente de la Asamblea Nacional Venezolana, el parlamento legítimo salido de las urnas. Ha pasado medio año y el líder del régimen, Nicolás Maduro, sigue en el poder y la crisis humanitaria crece día a día.

Durante estos meses hemos podido ver a Maduro bloqueando la llegada de ayuda humanitaria. La situación sigue siendo crítica. De hecho, sigue el éxodo de venezolanos, las última cifra de las Naciones Unidas fija en más de cuatro millones los venezolanos que ha huido del país. Ayer por la tarde, noche en España, se produjo un nuevo apagón eléctrico que ha dejado a oscuras Caracas y una amplia mayoría de Estados durante siete horas. Es la quinta vez que sucede algo parecido en los últimos cinco meses. Imagínate, ya no sólo los hogares, sino hospitales.

También sigue creciendo el número de presos políticos, que podría estar cercano al millar de personas. Aunque también hemos asistido a la excarcelación del líder opositor del líder opositor, Leopoldo López que se se encuentra hospedado en la residencia del embajador español en Caracas desde el pasado uno de mayo tras la intervención de mandos militares. Su mujer, Lilian Tintori está en España junto a la hija pequeña del matrimonio.

Hoy está previsto que los venezolanos volverán a salir a las calles en una manifestación convocada por Juan Guaidó en Caracas. Para conocer de primera mano la situación, hablamos con el periodista Luis Carlos Díaz, venezolano y español, que llegó a ser detenido en marzo precisamente por una investigación sobre uno de estos cortes eléctricos que se han convertido en habituales: “Ayer pude ver como el metro de Caracas dejaba de funcionar y la calle se convertía en una especie de hormiguero de personas que tenían que atravesar la ciudad a pie o subirse a las grúas o camiones grandes que pasaban por las grandes vías”, nos relataba.

Preguntado por un balance sobre este período de medio año desde la llegada de Juan Guaidó indicaba que “lo que ha cambiado es la capacidad de presión internacional. En esa negociación la oposición ahora tiene un poco más que ofrecer, presionar. Guaidó no puede cambiar mágicamente la situación”.