Alcarrás es uno de los municipios del Segrià afectados por los brotes en Lleida, y además colinda con las comarcas de Aragón donde surgieron esos primeros casos entre los temporeros.

Ahora, el ayuntamiento de esta localidad, ante la falta de recursos proporcinados por la Generalitat, ha decidido afrontar la crisis sanitaria por su cuenta y ha creado su propio equipo de rastreadores para localizar los contactos de las personas que han dado positivo en las pruebas PCR.

El equipo está formado por 10 personas. El alcalde, Manel Ezquerra, participa activamente en las labores de rastreo. También cabe destacar que entre sus filas se encuentra un temporero de origen senegalés que ayuda a buscar posibles inmigrantes infectados.

Jordi Charles, coordinador del grupo, ha manifestado en los micrófonos de ‘Mediodía COPE’ que la presencia de este enlace es fundamental porque “hay que darles proximidad”. Jordi nos ha contado que este trabajador africano ha tenido que estar confinado y “sabe exactamente lo que es para trasladarlo a sus compatriotas”. La tranquilidad es algo vital en estos casos, porque como ha indicado Charles, estos inmigrantes suelen vivir agrupados en viviendas muy pequeñas y “cuando hay un positivo, el resto se va rápido por miedo”.

Este servicio se produce en una semana clave para estabilizar el número de contagios. De hecho, se han registrado 58 positivos asintomáticos en la residencia de ancianos que hasta ahora se había visto libre de Covid-19. “Nosotros conocemos el terreno”, ha apuntado Charles, “y creemos que un rastreo no tiene que ser solo por vía telefónica”.

Por ello, este grupo de rastreadores se ha lanzado a frenar el avance del virus porque, como ha añadido el coordinador, “la administración tiene sus medios, pero a menudo, son insuficientes”. Esta iniciativa se ha tomado después de que el consistorio no haya obtenido una respuesta contundente de la Generalitat ni de la delegación de Gobierno, para controlar el brote.