El Plan Integral de Prevención y Control del Tabaquismo se aprobará, según ha podido saber COPE, en el Consejo de Ministros de la próxima semana.

El plan, que según la ministra de Sanidad, Mónica García, es "pionero, ambicioso y comprometido" plantea entre otras medidas: la ampliación de los espacios libres de humo, el aumento del precio del tabaco y de los productos derivados y la prohibición de los vaper de un solo uso con o sin nicotina.

Sanidad quiere que a finales de este año se hayan aprobado las principales modificaciones legislativas que incluye. La primera de ellas, el establecimiento del empaquetado neutro ya está en marcha.

Las principales medidas del plan

Entre los aspectos más relevantes del Plan Integral de Prevención y Control del Tabaquismo cabe destacar, la prohibición de los vaper de un solo uso con o sin nicotina. Para el que no conozca como son estos dispositivos, su característica principal es la facilidad de uso, basta con sacarlos del envoltorio y aspirar. No hay que encender ningún botón y funcionan con una batería interna y una resistencia, además del líquido que podemos consumir hasta que se agote sin recargas necesarias.

Se le podría considerar como la puerta de entrada al tabaco de muchos jóvenes. Además, no solo afectan a la salud por las sustancias que contienen, sino que encima son de plástico y son altamente contaminantes. Dos razones de peso para que Sanidad haya propuesto prohibirlos.

El plan quiere conseguir 5 metas y 23 objetivos que incluye: ampliar los espacios libres de humo tanto de tabaco como de cigarrillos electrónicos, debiéndose debatirse el tema de las terrazas que no se mencionan en el plan, pero cuya prohibición sí quiere Sanidad incluir en la futura Ley.

Mayor control y seguimiento del consumo y de la venta, además de la publicidad. El empaquetado neutro del tabaco, que es lo primero que se va a regular, hará que todas las cajetillas sean iguales independientemente de su marca.

Habrá una subida de impuestos que lleva aparejada un aumento del precio del tabaco y de los productos derivados con una tasa especial para los cigarrillos electrónicos. Pendiente de negociar con Hacienda.

Implicación de los ayuntamientos

El Ministerio de Sanidad insta a los ayuntamientos a que pongan en marcha ordenanzas municipales que prohíban tirar colillas en las vías públicas y los espacios naturales, abriendo la puerta al establecimiento de sanciones. Y todo porque al ser en su mayoría plástico son altamente contaminantes y emiten sustancias tóxicas al ambiente como nicotina, piridina o benceno.

En el agua, una sola colilla puede tardar hasta 12 años en desintegrarse. Diversos estudios cifran en hasta 1.000, los litros de agua que puede llegar a contaminar un solo desecho de un cigarrillo.

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Por últimos, se pide una mayor financiación de medidas destinadas a la prevención y también a reducir el consumo de tabaco como incluir los tratamientos para dejar de fumar en la cartera básica del Sistema Nacional de Salud ampliando los criterios para poder beneficiarse de ellos y también el acceso a otros fármacos alternativos.

Hace dos semanas que el Ministerio de Sanidad y las CC.AA. aprobaron el Plan. Sanidad quiere que a finales de este año se hayan aprobado las principales modificaciones legislativas que incluye.