

Pilar G.Muñiz: “Es una de las peores tragedias en la zona. Pero lo terrible es que es una más, una de tantas”
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Sabes que nos gusta en Mediodía siempre dejar una puerta abierta a la esperanza o a que llegue una buena noticia.
Pero la cruda realidad hoy, ahora mismo, es que ya apenas hay posibilidades de encontrar con vida a ninguno de los náufragos del pesquero que intentaba alcanzar las costas de Italia y que volcó antes de hundirse, por motivos que todavía no están claros. A esta hora quedan cinco embarcaciones y un helicóptero rastreando la zona... recorriendo esas aguas internacionales en el Mar Jónico, a unos 75 km de las costas griegas. Y son esos equipos de rescate, los que están sobre el terreno, y los que ya dicen que es “extremadamente difícil” encontrar a nadie vivo.
¿De cuántas vidas perdidas hablamos entonces? Pues posiblemente, de unas 400 o incluso más. Nos podríamos quedar cortos por desgracia. Porque se han recuperado casi 80 cuerpos sin vida y hay 104 rescatados. Es decir: sólo sabemos qué ha pasado con unas 180 personas pero se estima que podría llegar a haber hasta 700 a bordo de ese pesquero que salió de Egipto y que hizo escala en Libia, para recoger a su particular “mercancía”. Porque así es como les tratan, como puro cargamento. Hoy sabemos que pagaron entre 4.000 y 6.000 euros por persona y que no había ni un chaleco salvavidas a bordo. Eso cuentan los propios supervivientes, todos hombres por cierto, mientras que no hay ni rastro de mujeres ni de niños, que viajaban en la bodega.
Es una de las peores tragedias en la zona, pero lo peor, es que es una más, una de tantas. Y viendo al Papa Francisco esta mañana al salir del hospital, hablando de ”tanto dolor” al acordarse estas víctimas, caíamos en la cuenta de aquello de la “vergoña”: la vergüenza de la que habló también el Papa en uno de sus discursos más famosos.
De estas palabras han pasado casi 10 años (se cumplen en octubre...) Y ha habido muchas otras “Lampedusas” como aquella... sin que apenas nada haya cambiado hoy, vivimos la última.
Sólo en 2022, se estima que murieron en el Mediterráneo unas 2.500 personas intentando alcanzar “el dorado” europeo. ¿Y qué se está haciendo para evitarlo? Pues es verdad que se ha dado un paso importante después de siete años de bloqueo, con el llamado “mecanismo de solidaridad”, que al menos propone que los países que no acojan refugiados paguen al resto para ayudar. (Sería un pago de 20.000 euros por migrante rechazado). Pero en el mejor de los casos.. y si hubiera acuerdo, hablaríamos de 30.000 acogidos al año, cuando se sabe que llegan, al menos, 10 veces más. Y ahí por tanto, en el hecho de que el Mediterráneo vaya a seguir siendo un cementerio parece que no hay ni siquiera plan a la vista. Así que al final no habrá política eficiente para hacer frente a este desafío hasta que no caigamos en la cuenta de que hablamos de personas, como tú y como yo. Personas que ahora mismo, pueden estar en cualquier punto perdido del Mediterráneo, a la deriva, y a punto de repetir un episodio como el del Jónico.



