"Es como si la UCO, estuviese cerca de completar el puzzle gigantesco, opaco, complicado, que empezaron a hacer poco a poco con las primeras piezas sospechosas y que ahora podría alcanzar un ritmo vertiginoso"

Vaya 48 horas de registros y detenciones que llevamos. Todas ellas relacionadas con presuntos casos de corrupción que ponen en una situación muy muy complicada al gobierno de Pedro Sánchez. Esta misma mañana la UCO de la Guardia Civil irrumpía en la sede de Correos y los Ministerios de Hacienda y Transición Ecológica. Es el último episodio de la trama Leire que apunta a algo más que una presunta fontanera.

Porque ya no estamos hablando de movimientos en las cloacas para conseguir información que desacreditase precisamente a la UCO, sino una nueva causa abierta por irregularidades en contrataciones públicas. Fíjate que a la misma hora que la Guardia Civil registraba Correos, Hacienda y Transición Ecológica, Pedro Sánchez se manifestaba a través de Twitter y el presidente del Gobierno sacaba pecho compartiendo una entrevista que le han hecho en el semanario italiano el Espresso que acaba de elegirle como persona del año. No parece un reconocimiento suficiente como para darle la vuelta a esta legislatura, sobre todo teniendo en cuenta todo lo que está pasando.

Tres detenciones clave: Leire Díez, Vicente Fernández, el que fuera presidente de la SEPI y mano derecha de María Jesús Montero y Antxon Alonso de Servinabar, la empresa que compartía con Santos Cerdán y con la que presuntamente se habrían beneficiado de mordidas del 2% en obras públicas. A esto hay que sumarle los registros en los ministerios, las empresas públicas y ojo, también en Plus Ultra, la aerolínea hispano-venezolana rescatada por el gobierno en 2021 durante la pandemia. En este registro también hubo dos detenidos, el CEO y el propietario, pero poco más se sabe del caso, porque se encuentra bajo secreto de sumario.

No creo tampoco que sea suficiente para darle la vuelta al último CIS que conocíamos hoy y esos nueve puntos de ventaja que da al PSOE sobre el Partido Popular, sobre todo cuando se siguen escuchando voces críticas de dentro del partido, voces de mujeres que denuncian los presuntos casos de acoso sexual y la falta de respuesta dentro del PSOE. Hoy la secretaria de organización, Rebeca Torró, ha dejado claro que no van a llevar el caso de Paco Salazar ante la Fiscalía.

Al PSOE le crecen los enanos y el ritmo de polémicas, casos de corrupción, registros y detenciones es tan alto que es normal que uno acabe perdiéndose entre todas las presuntas tramas. Pero lo que parece claro, lo que se respira, lo que se huele, es un cierto ambiente de descomposición y no lo respiramos solamente de nosotros, también se respira dentro del Consejo de Ministros.

Un cambio profundo en el gobierno pide la vicepresidenta Yolanda Díaz. Y estas declaraciones son un dardo en toda regla, un paso de Sumar que lo enfrenta directamente al PSOE. Crece la sensación de que asistimos a una traca final. Es como si  la UCO, estuviese cerca de completar el puzzle gigantesco, opaco, complicado, que empezaron a hacer poco a poco con las primeras piezas sospechosas y que ahora podría alcanzar un ritmo vertiginoso. No sería extraño que todo se precipitase en los próximos días.

Sin presupuestos, sin mayoría en el Congreso, con voces críticas dentro del gobierno, con la polémica de los casos de acoso sexual en el partido con Ábalos y Koldo dentro de una cárcel por la que ya pasó casi 5 meses Santos Cerdán, con las detenciones, registros y nuevas investigaciones de las últimas horas. De verdad, ¿se puede aguantar así? ¿Se puede aguantar hasta 2027? No sé qué piensas tú, pero me da a mí que en ese barco solo quedan Tezanos, Sánchez y la revista italiana que acaba de nombrarle personaje del año.