El Gobierno ha descentralizado la asignatura de Historia de la ESO. Nunca antes había pasado una cosa así, los alumnos de entre 12 y 16 años no saben cuáles son los principales hechos históricos a los que tendrán que hacer frente a lo largo del año. Las leyes educativas de la Logse y la LOE del PSOE como en la Lomce del PP, siempre habían detallado cuál sería el contenido. Esto ha cambiado, porque según el borrador de la ley no se quiere “incurrir en enfoques exclusivamente academicistas”.

Sin ninguna línea marcada para establecer los contenidos de la asignatura, serán las comunidades autónomas y sus centros quienes los concreten. Por ejemplo, si una comunidad decide que el estudio de los Reyes Católicos no es necesario, no se enseñará. “El sistema educativo precisa de un currículo más competencial, centrado en el aprendizaje más que en la enseñanza, haciendo hincapié en entornos de aprendizaje y pedagogías eficaces, que además permita aumentar los índices de acceso y de finalización de todos los niveles de la educación", reveló el Gobierno en su proyecto de Presupuestos Generales de Estado.

Por este motivo, el Gobierno pretende alejarse de los conocimientos concretos para evaluar actitudes.