2035 es la fecha marcada, y aprobada, por el Parlamento Europeo para la prohibición de vender vehículos de combustión en Europa. A partir de entonces, de 2035, los coches de combustión, diésel, e incluso los híbridos, serán agua pasada. Esto no quiere decir que no se vaya a poder circular con ellos a partir de esa fecha, pero sí significa que desde ese año en adelante, todos los coches y furgonetas nuevos que se comercialicen en la Unión Europea, deberán ser "cero emisiones".

Se aprobó el martes en el Parlamento Europeo, Antonio, pero con unas votaciones bastante ajustadas: 340 votos a favor, 279 en contra y 21 abstenciones y es que entre los eurodiputados hay dudas sobre si realmente, para esa fecha, 2035, seremos capaces de llegar al objetivo marcado. Eso sí, durante estos 12 años que faltan, se han marcado otras metas para lograr esa “transición”.

Por una parte, de 2025 a 2029, el índice de referencia de ventas de vehículos de emisión cero o de baja emisión, queda fijado en el 25% para los automóviles nuevos y en el 17% para las furgonetas nuevas, con recompensa a los fabricantes. Eso sí, partir de 2030, desaparecerán esas ayudas a la industria. Para ese momento, para 2030, las emisiones se habrán tenido que reducir en un 55% para automóviles nuevos, y en un 50% para furgonetas nuevas y ya sabes, para 2035, la reducción deberá ser del 100%.

En definitiva, el futuro del mercado europeo solo avanza en una dirección: la de los coches eléctricos, y aquí en España, el reto se presenta muy grande. En la actualidad, en nuestro país, existen unos 20.000 puntos de recarga para este tipo de vehículos. Jorge Alcalde, divulgador científico, nos aclara cuántos puntos necesitaríamos en 2035 para que esta transición sea viable.

Este problema, el de las “electrolineras”, también se suma al de instalar un punto de carga en casa. Algo que puede no ser rentable, como explica Pedro Prieto, Vicepresidente de la Asociación para el Estudio de los Recursos Energéticos.

Lo cierto, es que de los 24 millones de coches que están en circulación en nuestro país, solo el 3% son eléctricos. De hecho, estamos a la cola, porque la media en la Unión Europea está en torno al 10%. Y de hecho, hay países que nos sacan mucha más ventaja, como nos cuenta Jorge Alcalde.

Eso, contando con que los propietarios del coche tengan garaje que son, precisamente, el 50% de esos 24 millones de vehículos en España.Además, nos aclara por qué en esta norma no entran vehículos pesados como autobuses o camiones. Otro problema de fondo al que Prieto no ve solución fácil: la industria.

En España, operan 16 de las 290 factorías de automóviles que existen en Europa. Esto supone que nuestro país es el cuarto con mayor número de fábricas en el continente, una industria que sí o sí se va a tener que adaptar, y fabricar más modelos eléctricos. Félix García es directo de comunicación de la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles, y cree que este cambio de modelo debería hacer de una manera más transitoria.

Eso sí, podrán seguir fabricando y comercializando coches de combustión, en otros continentes, como China, aunque es poco probable.

Y en cuanto al mercado de segunda mano, no habrá problema tampoco. Se podrá vender o comprar un coche diésel o híbrido, por ejemplo, de segunda mano. Te recuerdo que la prohibición a partir de 2035 es de venta de coches de combustión, pero no de circulación, un objetivo que laUnión Europea había fijado para 2050.