Antonio Herraiz: "Si miramos a Francia hay que recordar el refrán de las barbas y el vecino"

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La evolución de la pandemia está descontrolada en España. Esta tarde, Sanidad volverá a actualizar las cifras que en el último registro dejaron un nuevo récord de 23.500 positivos y 173 fallecidos. Cataluña es una de las comunidades que ya ha adelantado los datos del día con casi 5.600 nuevos contagios y 34 fallecidos. Lo que denominan índice de rebrote sigue disparado.
En el caso de Andalucía, que es otra comunidad que adelanta sus registros, antes de que los ofrezca el ministerio de Sanidad, la evolución la pandemia también está disparada. Más de 5.100 positivos nuevos y 39 muertos. En Andalucía están a menos de 300 ingresos por coronavirus que durante el peor momento de la pandemia.
Son cifras muy malas, esto es así, pero hoy hemos encontrado un pequeño resquicio positivo. Es evidente que se detectan más positivos porque se están haciendo más test, en la mayoría de comunidades se localizan antes los casos y sus contactos, pero además se ha comprobado que desciende en España la mortalidad de los pacientes hospitalizados con COVID en UCI. El dato es esperanzador: 7 de cada 10 personas ingresadas en la UCI con coronavirus sobreviven. Lo ha contado a COPE. Pedro Castro responsable de UCIS del Clinic de Barcelona. Así lo ha contado: “Esa mortalidad se ha ido reduciendo, se ha ido ajustando. Nosotros en nuestro hospital ahora misma a estas alturas, estamos en una mortalidad de entre el 10 y el 20 por ciento”.
Esta es de las pocas puertas para la esperanza porque, aunque superado el debate del toque de queda, superado también el de los aislamientos perimetrales, el debate ahora es el del confinamiento domiciliario. Nuevamente. Cataluña y Castilla y León ya han dicho que lo van a solicitar si no funcionan las medidas que han puesto en marcha.
13 comunidades cerradas, y 40 millones de españoles, 8 de cada 10, sin poder salir de sus comunidades de residencia salvo causa justificada. ¿Y hasta dónde pueden llegar las justificaciones? Pues es la pregunta que todos nos hacemos estos días. La Policía Foral de Navarra las está contestando en redes sociales y llevan más de 500 respuestas publicadas. Su jefe de Comunicación es Mikel Santamaría y nos contaba en Herrera en Cope que el problema para ellos es que al final, el agente a pie de calle es el que tiene que interpretar dependiendo de muchas circunstancias. Nos decía: “Al final el patrullero, el que está en la calle, es el que va a soportar sobre su espalda la interpretación de la norma, porque la casuística es tremenda. A partir de ahí, pues hay que hacer un ejercicio de empatía, hay que ver si hay riesgos de contagio”.
Lo que hay que hacer es ser responsables y no recurrir a la picaresca para bordear las normas.



