Se cumplen 40 años de la entrada en vigor del Estatuto de Autonomía de Castilla-La Mancha. El presidente de las Cortes, Pablo Bellido, cuenta en La Linterna lo que ha cambiado el territorio durante todo este tiempo

Iglesia, cárcel, parque de bomberos o escuela de esgrima. Son solo unos ejemplos de lo que fue en su día el hemiciclo actual. Lleva siendo sede de las Cortes desde 1985, pero hoy le ha cedido un hueco al programa La Linterna. “Más de la mitad de la población actual de Castilla-La Mancha no había nacido cuando se aprobó el Estatuto de Autonomía”, así comenzaba su intervención el presidente de las Cortes, Pablo Bellido. Este es un territorio joven que ha experimentado un gran crecimiento durante este tiempo.

Más población y más joven

Se trata de la tercera región más extensa del país, que ha sumado en los últimos años más de 400.000 nuevos manchegos. Lo cierto es que es un territorio que no ha dejado de crecer, y que apuesta por el futuro de sus ciudadanos. Actualmente han conseguido triplicar el número de mujeres que están trabajando y con ello su riqueza. Otra de las cuestiones que ha aprovechado para destacar el presidente, es que se han convertido en la Comunidad Autónoma con más kilómetros de autovía y de alta velocidad. Todo ello ha contribuido en el desarrollo y el crecimiento de Castilla-La Mancha.

Aún queda por mejorar

Y aunque hay muchas cifras buenas, Pablo tiene claro que aún queda mucho camino por recorrer: “tenemos que seguir construyendo el estado de bienestar, tenemos que traer riqueza. Quedan cosas por hacer y son muy importantes”. Uno de sus principales desafíos actuales es conseguir que todos los manchegos mejoren su calidad de vida. Porque con ello, se estará apostando por una mejor Castilla-La Mancha.

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España vaciada

El fenómeno de la despoblación es una cuestión que preocupa en toda España, y también en Castilla-La Mancha. Por eso han decidido actuar y conformar una Ley para lidiar con este problema. 'Hemos establecido tres grandes medidas. La primera es defender los servicios públicos en el mundo rural (…) La segunda son ayudas a la inversión económica, van a tener ayudas reales. Y la tercera la fiscalía diferenciada, hay que permitir a las personas que están más lejos de servicios públicos y privados, paguen algo menos de impuestos para compensarlo. Y lo estamos haciendo'.