

Ángel Expósito se atreve con Castilla y León: "Ganará Mañueco, pero no se sabe por cuánto"
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Ya, ya sabemos que lo de Rafa Nadal no es normal. Ser el número uno en algo, en lo que sea, no es normal. Y ser el mejor de la historia... menos aún. Desde hace unos meses hablamos mucho de salud mental. De problemas, desequilibrios, desajustes, depresiones y soledad. Bueno pues lo de Rafa Nadal también es un tema mental.
La raqueta, los gemelos, su codo izquierdo. Todo es importante, pero su cerebro es la clave. ¿Cómo puede ser un tipo normal después de lo conseguido ayer en el Open de Australia? Toda la admiración posible para este hombre. No hay palabras. Los sentimientos que provocó Nadal se resumen con el audio de un vídeo que me llegó anoche desde Mali. Es el instante en que un grupo de soldados españoles en Mali celebra el último golpe de Nadal ante Medverev. Lo dicho: orgullo, honor, sacrificio y humildad. ¡Qué lección! Por lo demás, el tema sigue siendo la amenaza de guerra en Ucrania. Hace una semana estábamos allí mismo en las calles de Kiev y quiero pensar que, con perdón, la sangre no llegará al río. En este caso al inmenso río Dnieper. Pero surgen a cada momento un montón de debates que dejan al descubierto nuestras fortalezas y nuestras miserias.Nuestra libertad frente a una mezcla entre zarismo y el soviet; nuestra democracia frente a la falta de libertades en Rusia. La OTAN o la Unión Europea frente a nuestra política cutre miope y paleta. Los grandes países frente a nuestro Gobierno de coalición cada día que pasa más insensato.
En este sentido, no paro de darle vueltas al "perfil bajo" que ha marcado Moncloa para abordar la cuestión: Nuestros diplomáticos no pueden hablar; nuestros militares tampoco y Sánchez no se digna a comparecer en el Congreso y todo para que no se enfaden las súbditas de Pablo Iglesias.
Barcos de guerra en el Mar Negro, blindados y 400 soldados en Letonia a 15 bajo cero, cazas F 18 en Lituania y Bulgaria y, eso sí, perfil bajo para no importunar a Su Sanchidad. Para que no se moleste Garzón, Ione Belarra o Irene Montero que, por cierto, bastante con Eurovisión.Resulta que, como debe ser, estamos metidos de hoz y coz en la OTAN pero apenas se puede contar para no molestar a Su Sanchidad, a los socios o al macho alfa. No atinan ni cuando aciertan.
En clave meramente nacional plena campaña electoral en Castilla y León. Ganará Mañueco pero no se sabe por cuánto; Vox será clave pero no se sabe hasta qué punto y Pedro Sánchez se quita de remedio para no mancharse con la derrota. ¡Menudo es él! para enfrentarse a las malas noticias. El resto. Ciudadanos sigue en el suicidio poco a poco y Podemos peor todavía, ¿Vamos apostando a ver cuánto tarda Pablo Iglesias en volver? ¡AH! Y MI POSDATA. Eurovisión y el debate en torno a la canción española que irá al festival.1.- No somos, así en general, no somos más ridículos ni horteras porque no nos entrenamos.
2.- ¿De verdad este es un tema para que Podemos lo lleve al Parlamento?
3.- ¿De verdad el tema ese de las tetas era una buena canción? ¿En serio?
4.- Cuando no son las brujas en Cataluña, es Garzón con la huelga de juguetes y ahora, la canción de Eurovisión.
y 5.- Esto se liado con una cantante cubana-española que ha ganado a la señora de la tema de mamá o algo así.
¿Te imaginas que hubiera ganado un tío del Real Madrid, taurino y hetero? ¿A dónde habríamos llegado? ¡¡¡ ¿Un tío heterosexual en Eurovisión? !!! Qué escándalo.