Marruecos ante un Gobierno débil y con estos socios. Hoy me quiero referir a lo que está pasando en lo que fue el Sáhara Occidental, aquel Sáhara español.

Marruecos no da puntada sin hilo. Ni en la valla de Ceuta y Melilla, ni en los montes aledaños ni en el islote de Perejil, ni con las aguas territoriales. Y cuánto más débil es el Gobierno, más aprieta.

Aznar lo vio en Perejil y lo paró con boinas verdes. Rubalcaba paró la crisis de los cayucos con dinero. Y ahora, Mohamed VI aprieta con miles de magrebíes hacia Canarias y con sus Fuerzas Armadas otra vez en el Sáhara y hasta ha cerrado las fronteras de Ceuta y Melilla.

¿Habéis visto donde está Guerguerat? En el pico con Mauritania. La distancia entre Marruecos y Canarias son 864 kmts. Y ahí en medio (y esto es clave) la plataforma continental con telurio y cobalto, materiales claves para fabricar. Coches eléctricos o paneles solares.

Todo ello, a sabiendas de que el Gobierno de España es débil. Muy débil, con el enemigo dentro. Y por eso Marruecos nos pone en una situación imposible en Canarias, en la geoestrategia y con los minerales.

Y nosotros mientras, mirándonos el ombligo.

Las llegadas de inmigrantes a Canarias por mar crecen un 1.019,16% en lo que va de año

Canarias ha recibido un total de 16.760 inmigrantes por vía marítima entre el 1 de enero y el 15 de noviembre de 2020, lo que ha supuesto un incremento de 1.019,6 por ciento (+15.263 inmigrantes) con respecto al mismo periodo del 2019 cuando alcanzaron las costas del archipiélago 1.497 personas, según se desprende del informe de inmigración del Ministerio de Interior.

En cuanto a las embarcaciones irregulares llegadas a las islas han ascendido a 553 hasta el 15 de noviembre a diferencia de las 93 del pasado año, lo que ha implicado la llegada de 460 más (+494,6%).