Esta es la provincia más económica en España para comprar una vivienda en 2025 y cuánto tienes que tener ahorrado en el banco

La Linterna explica que en mayo de este año el número de hipotecas concedidas aumentó un 54%, y su importe medio superó los 158.000 euros

Paco Delgado

Madrid - Publicado el

3 min lectura

El mercado de la vivienda en España vive un momento de tensión sin precedentes. Los precios no dejan de subir, las hipotecas se disparan y la falta de oferta agudiza la crisis de acceso a una casa propia. Según los últimos datos analizados en el programa La Linterna, casi seis de cada diez nuevos hipotecados necesitan recurrir a un crédito adicional o a ayuda familiar para cubrir los gastos asociados a la compra. En mayo de 2025, el número de hipotecas concedidas aumentó un 54%, y su importe medio superó los 158.000 euros, un 13% más que en el mismo mes del año anterior.

 Las provincias más asequibles para la vivienda  

Frente a esta realidad, algunas provincias emergen como alternativas más económicas. Ciudad Real, Jaén y Zamora se posicionan como los territorios donde comprar una vivienda resulta menos oneroso. En Ciudad Real, el precio medio del metro cuadrado ronda los 954 euros el metro cuadrado, muy por debajo de la media nacional, que supera los 2.460 euros. Jaén y Zamora también destacan por su accesibilidad, con precios que no alcanzan los 1.300 euros/m² en sus capitales.

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Vivienda en construcción

Sin embargo, incluso en estas zonas, el ahorro necesario para adquirir una casa sigue siendo una barrera. De media, se requieren unos 45.000 euros en efectivo para hacer frente a la entrada (20% del valor de la vivienda) y los gastos adicionales (notaría, impuestos, registros). En ciudades como Madrid, Barcelona o Baleares, esta cifra se eleva hasta los 70.000 euros o más, pero en provincias como Ciudad Real, el desembolso inicial puede reducirse significativamente.

 Un mercado inmobiliario en crisis  

La raíz del problema no es nueva: la falta de vivienda disponible. Según expertos consultados en el reportaje, en España se construyen alrededor de 128.000 viviendas al año, pero se necesitarían al menos 250.000 para satisfacer la demanda y frenar la escalada de precios. Esta escasez ha convertido la compra de una casa en una "carrera de obstáculos", como relata Carlos, un comprador de Madrid que finalmente adquirió su vivienda con prisas ante el temor de que los precios siguieran subiendo.

Y es que el perfil del comprador ha cambiado. Actualmente, dos de cada diez adquieren una vivienda tras vender otra, aprovechando la revalorización de sus propiedades. Pero para los jóvenes y las familias con rentas bajas, el acceso a la propiedad se ha vuelto casi imposible. "Lo malo son fundamentalmente los jóvenes, que lo tienen cada vez más difícil", señalaba Yolanda Gómez durante la tertulia.

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Carteles de 'se vende' y 'se alquila' en la ventana de un piso de Valencia

Además, los bancos son cada vez más estrictos con los criterios de concesión de hipotecas. Lo ideal, según los expertos, es que la cuota mensual no supere el 30-35% del salario. Es decir, alguien que gane 1.500 euros al mes no debería pagar más de 525 euros de hipoteca. Endeudarse para cubrir la entrada de la vivienda no es recomendable, pero muchas familias no tienen otra opción.

 La vivienda social, una asignatura pendiente  

Mientras el mercado privado se encarece, la vivienda social sigue siendo insuficiente. España apenas destina el 2,5% de su parque inmobiliario a vivienda protegida, cuatro veces menos que la media europea. Además, buena parte de estas viviendas pierden su calificación de protección al cabo de unos años, lo que las convierte en objeto de especulación en lugar de garantizar un acceso permanente a familias vulnerables.

"En otros países, la protección es de por vida. En España, se liberan después de 15 o 20 años, y el parque no crece", explicaba Yolanda Gómez. La reforma de la Ley del Suelo y la construcción de más vivienda pública son claves para revertir esta situación, pero los avances son lentos y las disputas políticas frenan cualquier acuerdo.

Así, a corto plazo, los precios seguirán subiendo, aunque a un ritmo más moderado en algunas zonas. La provincia de Ciudad Real se consolida como la más económica para comprar, pero incluso allí, el ahorro necesario ronda los 30.000-40.000 euros. Sin medidas urgentes que aumenten la oferta y regulen el mercado, la brecha entre quienes pueden permitirse una vivienda y quienes no seguirá creciendo.