Valentín Aparicio, sacerdote de Toledo, ofrece su desayuno espiritual en Youtube: "Mi algoritmo es el Espíritu Santo"

Se llama en redes @curadetoledo, diócesis donde ejerce su ministerio como formador del Seminario y del Instituto Teológico San Ildefonso.  Ahora, pretende hacer llegar a todos, vía online, la Palabra de Dios 

Ana Medina
00:00

Ana Medina

Publicado el

5 min lectura

Se llama en redes @curadetoledo, y es que es en esta diócesis donde ejerce su ministerio como formador del Seminario y del Instituto Teológico San Ildefonso, entre otras responsabilidades. Pero su feligresía se extiende más allá de los límites geográficos. Después de profundizar en Roma y Jerusalén en arqueología, las lenguas antiguas y la Sagrada Escritura, sintió la necesidad de acercar a todos a la Palabra de Dios, también a través del mundo digital.

«Siempre desayuno dos veces», nos confiesa. «La primera cuando me levanto a las seis de la mañana, que me tomo el café. Y luego después de un rato, cuando he celebrado misa, he rezado y he estado con los chicos aquí en el seminario presidiendo las oraciones de la mañana. Estamos dos horas en la capilla para que os hagáis una idea todos los días antes de comenzar el día. Entonces necesito desayunar otro poquito otra segunda vez».

Pero el alimento más importante de su dieta es la Biblia. Este sacerdote es un profundo conocedor de las Escrituras. De esa vocación, surgió la idea de los vídeos que cada día sube a internet. «Los llamo un desayuno espiritual porque explico el Evangelio, doy una reflexión al iniciar el día con la palabra de Dios, a la vez que me tomo un café. Hago desayuno material y también desayuno espiritual. Todos los días, a las 6 y cuarto de la mañana, grabo la reflexión del evangelio y la subo».

"Te das cuenta de que la gente está muy sol"  

Valentín Aparicio cuenta que «el desayuno espiritual nació por la inquietud que tenía de dar a conocer la palabra de Dios. Durante un tiempo estuve estudiando en Roma y en Jerusalén. Estudié Biblia, aprendí todo lo que son las lenguas antiguas en que está escrita la palabra de Dios, el griego, el arameo, el hebreo… También profundicé un poco en la arqueología para conocer el contexto cultural del Antiguo y del Nuevo Testamento. Y entonces comencé a dar clase en nuestro Instituto Teológico, tanto a laicos como a seminaristas, pero me parecía poco llegar simplemente a la audiencia que tenía delante de los ojos. Esto lo debe conocer todo el mundo. Decía san Jerónimo que desconocer la Palabra de Dios es desconocer a Cristo.  Así que, veía cómo a los chavales les ayudaban las explicaciones que les iba dando para conocer en profundidad la Biblia, y me lancé».

Lo que Valentín busca, sobre todo, es «que todo mundo pueda desayunar a la vez que está recibiendo una bomba espiritual ya al inicio del día».

No es fácil gestionar una comunidad grande de seguidores, sobre 100.000 personas le siguen en Youtube, Facebook, Instagram… «Es difícil lidiar con todas las cosas, sobre todo cuando la gente te lanza preguntas. Te das cuenta de que la gente está muy sola. Hoy día vemos cómo hay una  pérdida total del sentido y la gente quiere creer, está volviendo a la Iglesia porque tiene hambre de Dios, tiene sed de Dios y nuestra sociedad, que renuncia a Dios, que es secularista, lo que ha hecho es desacralizar el corazón del hombre, cuando este está hecho para el diálogo con Dios y para disfrutar de Él».

Dice recibir numerosas comunicaciones y querer estar a disposición de ellos, pero le resulta materialmente imposible. «Qué bonito que al menos alguien pueda recibir la palabra de Dios también a través de las redes sociales y que eso le ayude, le alimente hasta tal punto que su alma poco a poco se va acercando más a Dios», reconoce.

"A través de las redes sociales puedes estar en muchos sitios hablando de Dios"

Explica que «en una ocasión me escribió una madre que estaba tan, tan agobiada que había dejado a su familia, literalmente, al marido y a los hijos, había cerrado de un portazo la puerta de la casa y se había ido. Se fue a una casa sola durante varios días, estaba con ansiedad, sin poder parar de caminar por las calles, su cabeza dando vueltas, sin saber qué hacer. Me contó que entró en una iglesia, que nunca había rezado, y que buscando en qué entretenerse con el móvil, clica la palabra luz en Google y le sale una reflexión mía. Aquello le hizo sentir que era una voz de Dios que quería poner paz y sobre todo mucha luz a su alma y regresó, volvió con la familia y me escribió para darme las gracias».

«A través de las redes sociales puedes estar en muchos sitios hablando de Dios, que es una maravilla, y poder llegar más», agradece Valentín destacando la capacidad de estos medios.

Además, tiene la certeza de que su vídeo lo maneja un algoritmo especial: «Yo siempre digo que mi algoritmo es el Espíritu Santo, porque el vídeo, no sé cómo, llega a la persona que necesita ese día, por las circunstancias concretísimas de su vida, escuchar justo el mensaje que estoy explicando. Yo me siento como el que tira del gatillo, pero no apunto, apunta el Espíritu Santo, apunta Dios. Yo lanzo el mensaje y ese mensaje llega a aquel corazón que esté más roto, que esté más herido, que precisamente en las circunstancias de ese día necesite de esa palabra específica. Es impresionante, Dios hace milagros. Por eso no nos tenemos que cansar de hablar de Dios, nunca tengamos vergüenza por Dios, nunca nos callemos este mensaje. Como a los santos, nos tenía que quemar con fuego el corazón y nos tenía que quemar con fuego la palabra de Dios para que ese fuego se expandiera y se transmitiese a todos».

Temas relacionados

Visto en ABC

Programas

Último boletín

09:00 H | 11 OCT 2025 | BOLETÍN

Boletines COPE
Tracking