No hace falta que te cuente todo lo que ha cambiado nuestra vida la crisis que estamos viviendo. Uno de los cambios -aunque menores- es que este año celebramos el Día del Seminario el próximo 8 de diciembre. Un día para acordarnos de todas esas personas que se encuentran en el camino de entregar su vida a través del sacerdocio. El obispo auxiliar de Madrid y presidente de la Subcomisión para los Seminarios, mons. Jesús Vidal, reflexiona sobre la situación de las vocaciones y de la formación de los seminaristas en La Linterna de la Iglesia.

A pesar del cambio de fecha, mons. Vidal asegura que "no está pasando desapercebido. Lo tenemos muy vinculado a la fiesta de San José pero este año precisamente, al ser el día de la Inmaculada nos hemos movido más para promoverlo. Vincular el seminario a una madre que da a luz a unos hijos para la Iglesia, creo que es una cosa muy bonita. Resaltar el día del seminario en estas circunstancias es muy bonito".

"El lema está tomado del plan de formacion: "Formar pastores misionero"", explica el obispo auxiliar y afirma que "es la forma de resaltar este carácter misionero. Para que la Iglesia sea misionera hace falta que tenga pastores misioneros enamorados de Jesucristo y con ganas de llevarles a Dios".

Respecto a la situación vocacional en nuestro país, "el curso pasado había 1.128 seminaristas mayores y realmente es mucho menos de lo que necesitamos. No seríamos verdaderos si no lo viéramos. Necesitamos que el Señor mande más sacerdotes porque el pueblo de Dios necesita ser acompañado. Todos tenemos que concienciarnos de que hay que pedir a Dios trabajadores para la mies".

"La pandemia ha tocado mucho nuestros corazones y creo que no somos conscientes todavía" relata el presidente de la subcomisión para los seminarios. "Tenemos que salir de una forma nueva y es verdad que muchos jóvenes pueden haberse sentido tocados por toda la entrega que se ha producido".