Dejarlo todo para dedicar su vida a los demás en los países más necesitados es un acto de generosidad como pocos. En dos días celebraremos el Domingo Mundial de Misiones, el Domund, y por eso el arzobispo de Pamplona y obispo de Tudela, Monseñor Francisco Pérez, que es a su vez el Presidente de la Comisión de Misiones de la Conferencia Episcopal, ha estado con Irene Pozo en 'La Linterna de la Iglesia'.

"Lo primero de todo lo que hay que hacer es agradecerles a los misioneros, y luego rezar por ellos", ha dicho Monseñor Francisco Pérez. "Otra cosa que hay que hacer es vaciar los monederos y dejar también los billetes para poder colaborar con ellos en esa promoción humana y que puedan tener escuelas y ambularios".

Sobre las vocaciones misioneras, Monseñor Francisco Pérez ha confirmado que están disminuyendo, pero aún las hay y que en tiempo de pandemia muchos jóvenes invitan a seguir el mensaje de Jesús. "Muchos psiquiatras dicen que se ha perdido el sentido de la trascendencia, y eso es decrépito".

"Yo creo que en nuestra sociedad los hombres están haciéndose el centro de todo, pero lo cierto es que el hombre está hecho para dar", ha asegurado don Francisco en COPE. "Lo dice Jesús, que el que quiera ir detrás de él, que coja la cruz y lo siga". Según moseñor Francisco Pérez, los que van de misión quieren verse en el lugar en el que han dado frutos y han entregado su vida: "El otro día estuve en un pueblo de Navarra a donde llegó un misionero con 89 años y me dijo que allí se aburría".

"En verano hay más de mil jóvenes que van a tierras de misión, eso es marca España. Lo que ocurre es que a veces solo pensamos en misioneros como sacerdotes o religiosos; y cualquier laico puede ser misionero, hasta un matrimonio con cinco hijos que conocí el otro día y están en Ucrania", ha concluido.