Juan Pablo I, 'el Papa de la sonrisa', será beatificado el domingo

Albino Luciani, nombre de nacimiento de Juan Pablo I, fue el papa 263º de la Iglesia Católica. Nació en 1912 en una pequeña localidad alpina de Véneto, en el norte de Italia, llamada en aquel entonces 'Forno de Canale'. Hijo de un albañil y una ama de casa, fue el mayor de cuatro hermanos y durante su infancia le tocó vivir la crudeza de la Primera Guerra Mundial.

A los once años, ingresó en el seminario menor, donde ya destacó por su capacidad para el estudio. Cinco años después, con 16, pasó al seminario gregoriano de la ciudad de Beluno, donde fue ordenado presbítero en 1935 a la edad de 23 años.

Los cargos de responsabilidad fueron sucediéndose en (vicerrector del seminario; profesor de teología, de derecho canónico y de arte religioso; obispo de su diócesis...) hasta que en 1969, a los 57 años, Pablo VI lo nombró patriarca de Venecia. Cuatro años después, a los 61, lo creó cardenal. Y en 1978, con 65 años, (33 días antes de fallecer) fue elegido papa.

No es el más corto. De hecho, ha habido otros nueve que han durado menos que el suyo. El de Urbano VII, en 1590, es el más corto. Solo 12 días. Su sucesor (el sucesor de Juan Pablo I), san Juan Pablo II, protagonizó el segundo papado más largo de la historia (con 26 años, 5 meses y 18 días), solo superado por el de Pío IX (que estuvo 5 años más).

Otro dato curioso de este papa que va a ser beatificado es que es el último italiano hasta la fecha. Después de él han venido un polaco, un alemán y un argentino. Además de ser el último italiano, es que rompió la racha que venía durando cuatro siglos. En ese periodo, todos los papas (uno detrás de otro) habían nacido en Italia.

Pero sin duda, la característica por la que siempre será recordado Juan Pablo I (además de porque tuvo un pontificado muy breve) es su sonrisa. De hecho, se le recuerda frecuentemente como “el papa de la sonrisa”.