En 'La Linterna de la Iglesia' viajamos hasta Valencia para conocer a alguien que nació allí hace 95 años. Su nombre seguro que te suena: Amparo Portilla. Siendo muy joven se casó con Federico Romero y tuvieron 11 hijos en Madrid. Estudió magisterio y puericultura y fue una madre de familia normal. Ahora en 2020, 25 años después de su muerte, sus vecinos, amigos y familiares pueden presumir de haber conocido -por lo menos de momento- a una venerable. Así lo ha decretado el Papa Francisco hace unos días, confirmando sus virtudes heroicas y abriendo camino hacia su canonización. Pues si algo caracterizaba a Amparo, es que fue esposa, madre, amiga, compañera, fuerte luchadora y una mujer trabajadora que supo darse a todos a pesar de las muchas dificultades que vivió en muchos momentos.

Por 'La Linterna de la Iglesia' ha pasado su hija, Amparo Romero Portilla. Ella ha explicado que su madre "era una persona muy alegre, de fe. Tenía una fe muy profunda". Una persona muy dada a los demás en su entorno natural: familia, amigos. Además, recordaba que Amparo Portilla "era una mujer culta, tenía dos carreras. Una mujer a la que le gustaba todo en la vida: el arte, la música y hasta bailar, aunque no se le daba muy bien".

El proceso de canonización de Amparo Portilla comenzó un poco antes de su muerte, cuando sus familiares y el entorno cercano ya pensaban que la mujer que iba a morir podía subir a los altares: "Antes de fallecer, el 10 de mayo de 1996, teníamos la certeza de que podía ser santa. En el funeral la gente decía que no rezaba por ella, si no que le rezaba a ella". La hija ha explicado que su padre decidió un mes después de su muerte que era el momento de arrancar con el proceso: "Pensamos en pedir un texto y una estampa que nos autorizó el Arzobispado de Madrid y comenzamos a repartirla".

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Hace unos días conocíamos que el Papa Francisco reconocía las virtudes heroicas de Amparo Portilla Crespo, y en #LinternaIglesia7M @IrenePozo_ está charlando con Amparo Romero Portilla, hija de @AmparoPortillaC para que nos hable de la figura de su madrehttps://t.co/x8v9EHjKfw pic.twitter.com/wvBDFYt00a

— Religión COPE ? (@religion_cope) May 7, 2021

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25 años después de su muerte, la figura de Amparo continúa muy viva y está difundida por todo el mundo: "Es un ejemplo muy asequible. Hemos recibido un correo de un obispo de China, incluso, en el que nos dice que la pide como intercesora. Recibimos mensajes de todos lados".

La hija de Amparo Portilla recuerda con cariño que lo más importante que dejo a sus seres queridos es el ejemplo de su vida: "La hemos visto vivir como ella pensaba: con esa fe, con esa alegría en todo momento. Esa actitud ante la vida nos la ha inculcado. Y después el cuidado de la vida, de los niños, de las personas mayores. A Amparo le gustaba la vida. Estando mal disfrutaba del canto de los pájaros. Estaba alegre".

Preguntada por cuáles son los siguientes pasos tras ser declarada venerable por el Papa, Amparo Romero reconoce que "ahora es necesario que haya un milagro. Habitualmente, una curación. Ahora no nos compete el trabajo a nosotros. El trabajo humano ya está hecho. Esta en sus manos que interceda y haya alguna curación", concluía la hija de Amparo Portilla.