El portavoz de ERC, Gabriel Rufián, fue expulsado este miércoles del pleno del Congreso por la presidenta de la Cámara Baja, Ana Pastor, tras ser llamado al orden por tres veces al protagonizar un duro rifirrafe con el ministro de Asuntos Exteriores, Josep Borrell. Entre otras cosas, Rufián llamó "fascista" a Borrell y se levantó del escaño en varias ocasiones para interrumpir la intervención del ministro. Pidió la dimisión de Borrell por ser el ministro "más indigno de la historia de la democracia" y un "hooligan" militante de Sociedad Civil Catalana (SCC), que es una "organización de extrema derecha".

Tras su danteso espectáculo, que culminó con el supuesto escupitajo de su compañero Jordi Salvador hacia el ministro mientras abandonaba el hemiciclo, Carlos Herrera tiene algo que decirle al dirigente de ERC. En su monólogo de este jueves, el comunicador ha lamentado la actitud 'de matonismo' de Rufián. "Es un matonismo de feria, un matonismo de barrio, un pistolerismo verbal que nos remite al Parlamento de los años 30. Miren, Borrell podrá ser muchas cosas, pero desde luego ni es fascista, ni es hooligan, ni es de extrema derecha. Es un señor formado, con una carrera política que ya quisieran muchos tener y, además es de lo más consistente de este Gobierno. Que de repente se levante un tipejo, un 'malparit' - es una expresión catalana muy coloquial. Él entenderá bien. No sé si habla catalán. Si no, no tengo inconveniente en explicárselo -  y llame fascista a un tipo como Borrell es incomprensible", ha dicho.  "Llamar a alguien golpista es una descripción de los hechos. Llamar a alguien fascista es un insulto que, por cierto, se divulga tanto que ya somos todos fascistas aquí. ¿Quién no es fascista? Bueno, ya el que no sea fascista, perdóneme, es que algo no está haciendo bien", ha añadido.

Para Herrera, Rufián y su cuadrilla "son profesionales del odio con los que no se puede hablar absolutamente nada". "Para él, es una vanagloria haber sido el primer expulsado en 12 años. Vive para eso. También es verdad que tipos como Rufián luego acaban como juguetes rotos, ¿eh?. Pero él ahora mismo se siente un héroe. Le estamos haciendo un héroe. Yo ahora mismo lo estoy haciendo un héroe ante los suyos. Le encanta que digamos todo esto. Y los que le votan también les encanta porque le han votado para eso, no para otra cosa", ha dicho sobre él. 

Sobre el supuesto escupitajo, Herrera lo tiene claro: "Ya conocemos qué clase de tipejos son estos golpistas. Y yo me fío más de los testimonios de un señor como Borrell que de un golpista de un partido golpista", ha concluido. 

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