Manuel Marlasca y Luis Rendueles, dos veteranos y prestigiosos cronistas del género negro, han recopilado en un libro, trece crímenes sucedidos en nuestro país. Por sus páginas pasan policías, Guardias Civiles, Mossos, métodos, crímenes... motivos justificados o no.... Personas capaces de asesinar a sus propios hijos, asesinos que solo matan a gente sin techo, mujeres que matan, otros que pagan a terceros para que eliminen a quien les estorba…

Dicen que los distintos tipos de asesinos son un buen indicador de los problemas que tiene la sociedad, y además, se suma esa nueva posibilidad que dan las nuevas tecnologías para hacer más macabro aún un delito. Por ejemplo, imaginen presenciar un asesinato en directo por whatsapp. En este libro: “Territorio Negro”, algunos casos son muy conocidos, otros nada ¿de qué depende que un caso se haga mediático o no? Parece irónico, pero el hecho de que pueda hasta casi parecer una serie de televisión, hace más probable que se haga reseñable.

“Nos interesaba contar como una tragedia deja tocado a todo un pueblo” dice unos de sus autores Manuel Marlaska, y añade Luis Rendueles que “seguimos matando por lo mismo que hace décadas, aunque se le añade el componente de la mujer, que también matan”. Los asesinos, dicen en Herrera en COPE que no han cambiado: “hay quienes mataban de forma tranquila y ahora más bien matan con egolatría y satisfacción inmediata”.

Hay pocos asesinos natos, son las circunstancias y la pasiones las que van llevando a alguien a matar. Sobre casos sin resolver, muchos profesionales siguen investigando, algunos incluso con el caso ya cerrado. El que ha vuelto a ser noticia es el de Marta del Castillo, con la esperanza de que la geolocalización del teléfono pueda despejar dudas, pero se muestran negativos: “El caso estuvo a punto de resolverse cuando esos niñatos declararon por separado, pero después todo se ha ido manipulando”.