Imagine usted que es ciclista profesional. Es domingo 5 de septiembre. Plaza del Obradoiro. Santiago. Está contento. A sus 37 años acaba de completar su décima vuelta a España.

Como quien no quiere la cosa, se ha metido entre pecho y espalda 3.417 kilómetros en 21 días. “Pues nada, a casa a descansar”.... pensará... Sí, pero ya que estamos, me vuelvo en bici.

Total, son 1.000 kilómetros. Esto que suena a “bilbainada” lo está haciendo un señor que se llama Luis Angel Maté, ciclista del Euskatel, puesto número 30 en la Vuelta a España que acaba de terminar.

¿Por qué? Por disfrutar de la esencia de un deporte desgraciadamente bajo sospecha. En bici y con lo puesto, gozando del paisaje, parando donde le plazca, Luis Angel atraviesa estos días Portugal, Extremadura y Andalucía.

El sábado llegará a su casa en Marbella. Le esperan su mujer y sus hijos y una paella en un chiringuito de playa.

Punto y final a una aventura por el simple placer de montar en bici.