La Guardia Civil ha detenido a dos jóvenes como presuntos autores de los delitos de robo con fuerza, hurto y estafa, cometidos en La Palma,  Pozo Estrecho y Torre Pacheco. Se trata de dos individuos, de 18 y 19 años y nacionalidad española y marroquí, con antecedentes por delitos similares.

Durante la operación 'Mosten', enmarcada en el 'Plan contra el robo en viviendas', los guardias civiles han recuperado dos teléfonos móviles y 650 euros sustraídos.

La investigación se inició el pasado mes de febrero, cuando la Guardia Civil tuvo conocimiento de la comisión de varios robos en viviendas  que habían generado cierta alarma entre los vecinos.

Uno de los denunciantes relató a los agentes que el robo cometido en su domicilio se había saldado con la sustracción de gran cantidad de joyas, dinero en efectivo, teléfonos móviles, tarjetas bancarias y otros objetos de elevado valor económico.

Los investigadores llevaron a cabo la inspección ocular de la vivienda e iniciaron las pesquisas tendentes a la localización de las joyas y las tarjetas bancarias, efectos que podrían haber dejado huella en tiendas de compra-venta de oro y en movimientos financieros, respectivamente.

Estas indagaciones permitieron localizar las joyas robadas en un comercio de compra-venta de oro de San Javier. Los agentes constataron que la venta de las piezas de joyería se produjo el mismo día en que se cometió el robo, lo que permitió identificar a los sospechosos.

Establecida una primera línea de investigación y seguimiento sobre éstos, se confirmó su presunta relación con otro robo con fuerza en vivienda cometido en la diputación cartagenera de La Palma, de donde fueron sustraídos un teléfono móvil, un ordenador portátil y otros efectos de considerable valor.

La Guardia Civil averiguó que, ese mismo día, cuando regresaban de La Palma a Torre Pacheco, hicieron una parada en Pozo Estrecho con la supuesta intención de vender parte de su 'botín' sin éxito.

Sin embargo, se percataron de que un establecimiento donde se impartían clase deportivas a mujeres se encontraba abierto, por lo que aguardaron a que las clientas accedieran para introducirse con sigilo y apoderarse de algunas mochilas. Estos hurtos se saldaron con la sustracción de dos teléfonos móviles y dinero en efectivo.

Durante sus andanzas delictivas y mientras se desplazaban de un punto a otro para llevar a cabo los robos, habían utilizado una de las tarjetas de crédito robadas en el domicilio de Torre Pacheco para hacer todo tipo de compras, pagar la recarga de sus teléfonos móviles y comer.

Una vez obtenidos los indicios necesarios, la Guardia Civil estableció una serie de discretos dispositivos de vigilancia sobre los domicilios de los sospechosos, en Torre Pacheco, que han finalizado con la detención de ambos jóvenes a la salida de sus residencias.

Se trata de dos varones a los que se les atribuye la presunta autoría de los delitos de robo con fuerza, hurto y estafa. Según se desprende de la investigación, los ahora detenidos vigilaban concienzudamente durante días la vida cotidiana de los moradores de los domicilios que posteriormente asaltarían, para acceder con total tranquilidad. Para introducirse en las viviendas rompían, de forma violenta, con objetos contundentes las cerraduras de las puertas de acceso.

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Hasta el momento, la Guardia Civil ha esclarecido cinco hechos delictivos -dos robos con fuerza en vivienda, dos hurtos y una estafa (uso fraudulento de tarjeta de crédito)-, aunque los investigadores continúan con la operación, no descartando la implicación de los ahora arrestados en la comisión de más delitos.