Dos condenados y cuatro absueltos en el juicio por la muerte de Mikel Arzak.
Un acuerdo de conformidad entre las partes ha evitado este lunes el inicio del juicio en los juzgados de San Sebastián.

Eduardo Ruiz de Erentxun, abogado de uno de los condenados.
Madrid - Publicado el - Actualizado
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Un acuerdo de conformidad entre las partes, tras horas de negociaciones, ha evitado este lunes el inicio en San Sebastián del juicio sobre el caso de Mikel Arzak, el joven que murió en Agosto del 2013 tras ser alcanzado en la cabeza por una roca en el Paseo Nuevo, desprendida durante las obras de estabilización de una ladera del monte Urgull. De los seis imputados han sido condenados dos funcionarios del ayuntamiento de San Sebastián, en concreto el director de proyectos y obras y un ingeniero del área.
El primero ha sido condenado a una multa de tres meses a razón de 10 euros al día por un homicidio imprudente menos grave mientas que el segundo, ha sido condenado a una pena de seis meses de prisión por un homicidio imprudente grave. A ambos se les ha aplicado las circunstancias atenuantes de reparación del daño causado y de dilaciones indebidas, dado que el proceso judicial estuvo paralizado en dos periodos diferentes. Los otros cuatro imputados han quedado absueltos.
Indemnización
El acuerdo prevé además el pago de una indemnización de 200.000 euros a la familia del fallecido que abonarán el ayuntamiento de San Sebastián y su compañía aseguradora y que está todavía pendiente de abono. Acusaciones y defensas de los seis imputados han llevado a cabo intensas negociaciones hasta el último minuto durante un año para llegar a este pacto que evitara el juicio.
Satisfacción "relativa" en la defensa
El abogado de uno de los dos funcionarios condenados, Eduardo Ruiz de Erentxun, ha señalado a la salida de los juzgados de Atotxa en San Sebastián que "la satisfacción es relativa por las circunstancias en las que se produjo la muerte de Mikel Arzak" y ha subrayado que los ahora condenados han realizado un esfuerzo en aceptar el acuerdo para, entre otras cosas, "reconfortar de alguna manera, a la familia en una situación tan dura".