Para incentivar un uso responsable de la pirotecnia, el Ayuntamiento de Barakaldo ha presentado una campaña de sensibilización que incluirá el reparto en la calle de 1.200 orejeras y la difusión de carteles con el lema 'Tápate las orejas… solo por el frío’.

El objetivo de la campaña, presentada por concejal de Medio Natural de Barakaldo Alba Delgado, es que los vecinos entiendan que los petardos no solo causan molestias sino que pueden suponer un trastorno para mascotas, bebés, personas con autismo o en el caso de los vecinos de más edad pueden suponer un trastorno consecuencia del miedo, estrés, palpitaciones, taquicardias e incluso infartos.

La concejal advierte que “la lista de dolencias es muy amplia, por no hablar de las personas dañadas por la manipulación de artefactos, a menudo al estar próximos a la explosión”

En Navidad, igual que en noches de tormenta, nuestras mascotas, en especial los perros sufren y reaccionan con miedo. Los ruidos fuertes derivados de los petardos, de los truenos o de un golpe extraños provocan que las mascotas sientan miedo. Ante la explosión de un petardo no es nada raro que le provoque respuestas de pánico y huida.

Un petardo = un cartucho de escopeta

Según explica Alba Delgado, normalmente los petardos contienen al menos la misma cantidad pólvora que los cartuchos de escopeta por lo que el estruendo que produce llega a superar los 190 decibelios. En el caso de las mascotas, especialmente los perros «Se calcula que uno de cada cinco desapariciones de animales de compañía se debe a los ruidos fuertes o tormentas que les asustan y les hacen huir», ha apuntado. Para ayudarles el programa Barakaldo City Dog ofrecerás un curso en el centro cívico Clara Campoamor, con trucos y consejos para los interesados.