Marta Sánchez, enfermera del Hospital de Leza y madre de un jugador del Tedeón que disputaba un encuentro con el Villegas el pasado sábado, se convirtió en el 'ángel' de Pablo.

Tomó las riendas de la situación y coordinó un equipo sanitario improvisado para salvar la vida de Pablo Fabián, jugador del Villegas que cayó desplomado tras recibir un balonazo mientras jugaba un partido en el campo del Tedeón el pasado sábado.

El destino quiso que Marta no estuviera sola para salvar a este chaval de 14 años. El equipo 'médico' improvisado lo formaron una enfermera, un policía local de Logroño y padre de otro jugador y los entrenadores, que se convirtieron en los ángeles de la guarda de Pablo.

Todo comenzó con un balonazo que impactó de lleno en el pecho de Pablo y le produjo una parada cardiorespiratoria. Los gritos nerviosos y asustados pedían una médico en las gradas y en seguida llegó al terreno de juego Marta que se puedo a coordinar, con calma y eficacia, todos las maniobras. El resto de jugadores se fue a los vestuarios y el público guardó un silencio necesario para poder mantener la serenidad.

Marta explica en COPE que los primeros minutos son decisivos, "nuestra actuación fue vital, porque los primeros minutos tras una parada cardíaca son esenciales ya que el cerebro deja de recibir oxígeno y, a pesar de que se recuperó la consciencia, esto puede provocar secuelas graves".

Desde que se produjo el balonazo hasta que llegó la ambulancia medicalizada al campo pasaron 14 angustiosos minutos. Además, a pesar de recuperarse de la primera parada cardíaca gracias a las maniobras de reanimación y recuperar la consciencia, Pablo sufrió una segunda. Una vez que llegó la ambulancia, los sanitarios lograron estabilizarlo y fue trasladado al hospital San Pedro donde ingresó en la UCI y ahora se recupera. De hecho, ayer ya mostraba su sonrisa sentado sobre la cama. Probablemente haya que esperar resultados de pruebas pero la evolución ha sido positiva.

Y ahí, en primera línea, estaban los padres de Pablo que "aguantaron como campeones la situación". Marta recuerda emocionada la reacción de la madre de Pablo que está convencida de que esta enfermera es el 'ángel de Pablo'. "Cuando ya se fue la ambulancia, lloraba y me abrazaba, no me soltaba".

Los compañeros de Pablo le esperan con los brazos abiertos:

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Prepararon unas pancartas y las desplegaron durante el partido contra el Comillas para dar ánimos a Pablo y desearle una pronta recuperación.