Los vertidos de las desaladoras ponen en riesgo la praderas de posidonia en Baleares
Las aguas de las desaladoras pueden tener concentraciones de hasta 70 gramos de sal por litro, duplicando la concentración que permite el desarrollo de la posidonia

Posidonia
Madrid - Publicado el - Actualizado
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Un estudio de la Universidad de las Islas Baleares (UIB) destaca el impacto que las aguas hipersalinizadas procedentes de las plantas desaladoras tienen sobre esta especie esencial para el ecosistema marino. Y es que pueden tener concentraciones de hasta 70 gramos de sal por litro, duplicando la concentración que permite el desarrollo de la posidonia.
LA POSIDONIA, EL SECRETO DE LAS AGUAS CRISTALINAS DE BALEARES
Se calcula que más de 400 especies de vegetales y 1.000 de animales habitan en las praderas de posidonia. Por otro lado, las praderas funcionan como grandes filtradoras, colaborando en mantener el agua marina limpia y transparente.
La Posidonia oceanica es una planta marina endémica del mar Mediterráneo que tiene un papel esencial en los ecosistemas marinos. Las praderas de esta especie sólo prosperan de manera adecuada en aguas limpias y sanas, es decir, en zonas con buena calidad ambiental. De hecho, la posidonia requiere unas condiciones de calidad del agua muy estrictas para poder desarrollarse correctamente.

El ritmo de crecimiento lento de la posidonia, en combinación con su baja capacidad de producción de semillas, la hacen especialmente vulnerable y en muchos casos las pérdidas de biomasa pueden convertirse en irreversibles o únicamente recuperables a muy largo plazo. Uno de los factores que influyen en el desarrollo de la posidonia es la salinidad del agua.
En el Mediterráneo, la concentración de sales se sitúa entre los 35 y los 38 gramos por litro de agua y la posidonia tolera como máximo una salinidad de 39 gramos de sales por litro. En algunas zonas, sin embargo, la salinidad del agua se ve alterada por los vertidos de las plantas desaladoras de agua marina. Estas aguas hipersalinas pueden llegar a tener concentraciones de hasta 70 gramos de sales por litro, por lo que casi duplican la concentración de sales del agua marina.
Un estudio multidisciplinar realizado por el grupo de investigación en Ecología Interdisciplinaria de la Universidad de las Islas Baleares en colaboración con el grupo de investigación en Nutrición Comunitaria y Estrés Oxidativo de la UIB, que forma parte del CIBEROBN, y el Consejo Insular de Ibiza ha demostrado que la posidonia se ve severamente afectada por la liberación de aguas hipersalinas procedentes de las plantas desaladoras. El estudio se ha publicado recientemente en la prestigiosa revista Science of the Total Environment.
MÁS ESTRÉS OXIDATIVO Y DAÑO CELULAR
Los investigadores han utilizado técnicas bioquímicas y biomarcadores (marcadores de estrés oxidativo) para determinar el estado fisiológico de las plantas y la respuesta de las células de esta planta frente a la salinidad. Los resultados muestran que los marcadores de estrés oxidativo y daño celular incrementan en los puntos en que la salinidad del agua del mar es más elevada. También se ha detectado una disminución del tamaño de las hojas de Posidonia oceánica de más de un 75 por ciento en los puntos con una más salinidad.
Este estudio dirigido por el doctor Xavier Capó tiene el apoyo de la Cátedra de la Mar Iberostar, que forma parte del compromiso adquirido a través del movimiento Wave of Change, mediante el cual el Grupo Iberostar contribuye a la protección del medio marino en el contexto de sus tres líneas prioritarias. Una de estas líneas es la mejora de la salud costera, que incluye los aspectos que afectan a la salvaguarda de los hábitats de las praderas de posidonia