Hasta hace unos años era habitual que las manzanas que se producían en Galicia se vendiese a empresas asturianas para elaborar sidra en la comunidad vecina.
La creación de empresas propias- alguna con una producción importante- y la necesidad de buscar cultivos alternativos está prococando un aumento en la superficie que se dedica en la comunidad a la plantación de manzanos. Son actualmente unas 200 hectáreas, por ahora con variedades asturianas, pero con la intención de utilizar pronto manzana tradicionales del Noroeste.
Una parte importante de la producción sigue saliendo a fuera, pero en zonas como A Estrada, en Pontevedra, están suministrando materia prima a fábricas ubicadas en el sur de Lugo.
Sobre la evolución y las perspectivas del sector de la manzana de sidra hemos hablado en Cope Galicia con Francisco Otero, presidente de Afrugal, la Asociación de Fruticultores.