La Guardia Civil imputa a una pareja de Santiago más de 50 robos en comercios de Galicia
Reventaban las cristaleras de los establecimientos con tapas de alcantarilla o martillos y huían en un coche azul

Vídeo con las imágenes de los robos cometidos en distintos comercios de Galicia
Santiago - Publicado el
2 min lectura
La Guardia Civil acaba de esclarecer con la detención de una pareja residente en Santiago de Compostela, un hombre y una mujer, más de medio centenar de robos cometidos en distintos establecimientos comerciales de Galicia y que generaron gran alarma social entre mayo de 2024 y enero de 2025.
Concretamente, la investigación de casi un año denominada Operación BLUEHAMMER ha logrado desarticular una pareja criminal responsable de una oleada de 51 robos con fuerza en establecimientos comerciales de nueve municipios de las provincias de A Coruña y Pontevedra, en localidades como Ames, Teo, Brión, Santiago, Noia, Padrón, A Estrada, Valga y Barro.
Una investigación llevada a cabo por el Equipo ROCA de Santiago en colaboración con el Área de Investigación de Milladoiro-Ames y bajo la coordinación del Juzgado de Instrucción nº 2 de Ordes que se inició en la primavera de 2024 ante un incremento de robos violentos en Ordes y Sigüeiro.
Y después de comprobar cómo los asaltantes seguían un patrón similar: fracturaban cristaleras y accesos con tapas de alcantarilla o martillos, sustraían la caja registradora y huían rápidamente en un turismo azul.
detenidos in fraganti
Según el relato de la Guardia Civil, el 11 de diciembre de 2024 y tras semanas de seguimiento, la pareja fue detenida in fraganti después de asaltar una estación de servicio en As Casillas (Ordes). Sin embargo, los indicios apuntaban a un mayor número de hechos delictivos.

Momento de la detención in fraganti de la pareja de ladrones en Ordes
En una segunda fase, la Operación BLUEHAMMER-ASUBIOS, los investigadores recopilaron pruebas contundentes que permitieron ubicar a los sospechosos en la escena de los delitos, coincidiendo con fechas y horas de los asaltos
Las pruebas se complementaron con el análisis de imágenes de cámaras de seguridad que mostraban un mismo vehículo y elementos recurrentes en la vestimenta de los autores, como unas zapatillas blancas de marca. El modus operandi era siempre el mismo: uno ejecutaba el robo mientras el otro realizaba funciones de apoyo logístico y vigilancia.
Como resultado de esta operación, uno de los implicados permanece en prisión desde enero de este año, cumpliendo condena por hechos similares. Su cómplice ha sido formalmente imputada como coautora de todos los robos investigados. .
Con la conclusión de la Operación BLUEHAMMER, asegura la Guardia Civil, se da un paso crucial para frenar la delincuencia que afectaba directamente al pequeño comercio en el entorno rural y periurbano gallego, reafirmando su compromiso con la seguridad ciudadana.