Delegados de la CIG en la comarca de Ferrol, además de afiliados y simpatizantes, participaron a media mañana de este viernes, 13 de noviembre, en una cadena humana reivindicativa para visibilizar “la grave emergencia social y laboral que sufre la comarca y la necesidad de adoptar medidas urgentes para dotarla de futuro”, según ha asegurado el secretario xeral de este sindicato, Paulo Carril.

La protesta, que se enmarca en las movilizaciones que la CIG está desarrollando dentro de la campaña por una salida gallega justa de la crisis, consistió en una cadena humana desde la oficina del servicio de empleo de Esteiro hasta el edificio de la Xunta, en la plaza de España, para finalizar con una concentración y asamblea en este lugar.

Durante la acción, los participantes portaron carteles alusivos a los principales problemas de Ferrol, Eume y Ortegal: falta de carga de trabajo en el naval, imposición de una transición energética, deterioro de la ría, además de ausencia de proyectos industriales alternativos.

El secretario de la CIG de Ferrol, Manel Grandal, explicó que "con esta movilización queremos denunciar la situación que padece Ferrolterra con una pérdida continuada de puestos de trabajo, cierre de industrias y pérdida de población sin que exista ningún tipo de alternativa". Añadió que esta acción también se convocó aprovechando el debate de los Presupuestos Generales del Estado y de la Xunta, "para lograr que se revierta el abandono de nuestra comarca. Porque si antes ya estábamos en la sala de emergencias ahora estamos en la UCI, nos estamos jugando la supervivencia de esta comarca".