El Extremadura vive horas dramáticas, a expensas de que fructifique la operación Moreno-Páez, que están pendientes de poder cerrar la financiación con una entidad bancaria para inyectar liquidez en la cuenta del club.

A pesar de lo que se ha venido contando en los últimos días, el grupo andaluz sigue negociando; por tanto, no ha cambiado su interés por entrar en el Extremadura y evitar la catástrofe que se avecina.

Estamos ante un asunto que trasciende de una mera operación económica, ya que es el Extremadura UD el que está en juego; una SAD con un calado muy importante, no solo en la sociedad almendralejense, sino en la extremeña; de ahí que no podamos obviar cuestiones de índole política en esta historia.

Pero lo cierto es que la plantilla del Extremadura (cuerpo técnico y jugadores) siguen sin tener noticias que aporten luz. Manuel, el técnico, está en contacto permanente con el administrador concursal, que no va a autorizar gasto alguno para los partidos; Manolo Franganillo, que pagó el desplazamiento a Bilbao; y Daniel Moreno, el inversor.

Franganillo ha asegurado a COPE que los partidos ante el Talavera y el Dux se jugarán “al 100 por 100”.

Organizar el partido del jueves, a las 19 horas, en casa, ante el Talavera, cuesta unos 1.200 euros. El encuentro ante el Dux se jugaría el próximo domingo.

Y a todo esto, el Extremadura ha hecho oficial la baja de Casto, que pone fin a su etapa en el Extremadura. Morcillo, que no se subió al autobús para ir a Bilbao, ha entrenado esta mañana.