La Comunitat Valenciana ha interpuesto desde el confinamiento por el estado de alarma un total de 92.388 denuncias por no respetar dicho confinamiento. Esto supone cuatro veces más que todos las que fueron tramitadas durante el año 2018. Estos datos se han recogido hasta el pasado martes, 21 de abril, donde se recogen los 37 primeros días de estado de alarma. De esta cifra se desconoce cuales están ya en tramitación y cuantas han sido notificadas a los infractores ya que ninguna administración los ha facilitado. Esto podría terminar implicando que muchas no se cobren por prescripción.

Este aumento constante ha provocado que los controles policiales se hayan aumentado en las tres ciudades. En el caso de Valencia, podíamos ver esta mañana la calle Colón paralizada por un gran control policial, al que hay que sumar el resto de controles organizados de forma periódica en la ciudad y sus alrededores.

Desde que el lunes 13 volvieran muchas personas a trabajar de forma presencial las multas han ido en aumento. Por esa razón, la Delegación del Gobierno ya ha reforzado el número de funcionarios dedicados a tramitar estas denuncias, en un intento por evitar que la mayoría acaben siendo incobrables, aunque ese refuerzo puede terminar resultando insuficiente para hacer frente a la avalancha de expedientes, con sus correspondientes alegaciones.

Sembla una altra ciutat, sense tú, res és igual ❤️ Gràcies per complir majoritariament el confinament �� En la vostra responsabilitat i solidaritat, ens protegim tots i totes.

Estem a la teua disposició les 24 hores �� al #092 �� pic.twitter.com/gxAlTvzctb

— PoliciaLocalValència (@policialocalvlc) April 22, 2020

A ello se le suma otro escollo, aunque menor que el anterior: el del retraso en las notificaciones durante las dos primeras semanas del estado de alarma. Habitualmente, como ocurre con las denuncias de Tráfico, es Correos quien lleva al domicilio la multa. Sin embargo, Correos suspendió esa actividad con la entrada en vigor del decreto de alarma, al entender que no se trataba de una actividad urgente. Cuando Interior se dio cuenta, el Gobierno corrigió esa disfunción y Correos resucitó la actividad, pero para entonces ya se habían acumulado varios miles de denuncias sin notificar. De todos modos, el servicio postal ya ha desatascado ese embudo en la Comunitat.