Aire, la perra campeona del mundo en obediencia deportiva que cuida de los mayores
Esta pastora belga, ganadora del mundial, protagoniza un programa de terapia para mejorar el bienestar de los residentes en centros con mayores

Aire se ha ganado el cariño de los más mayores
Valencia - Publicado el
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Con solo cinco años, Aire, una perra de raza pastor belga Malinois, ha alcanzado la cima mundial en obediencia deportiva. Sin embargo, su mayor logro hoy es otro: se ha convertido en la protagonista de un innovador programa de terapias asistidas con animales en centros de mayores de Alcoy, donde ayuda a mejorar el bienestar físico, emocional y social de los residentes.
Un giro inesperado en su carrera
La historia de Aire comenzó con una búsqueda exhaustiva por parte de sus dueños, Nerea y Andreu, conscientes de que un pastor belga Malinois es una raza "complicada" que requiere experiencia y tiempo. Curiosamente, Aire no estaba destinada a la obediencia. "Ella iba a hacer otro deporte", comenta Nerea, refiriéndose al Agility. Sin embargo, pronto vieron que "disfrutaba muchísimo" con los ejercicios de obediencia junto a Andreu.
Así fue como empezaron a competir a nivel nacional, escalando categorías y acumulando victorias. La oportunidad de competir a nivel internacional se presentó el año pasado, cuando Aire quedó tercera del mundo en Italia. Este año, en mayo, viajaron a Karpenisi (Grecia), donde finalmente se proclamó campeona del mundo. "No nos lo creíamos, ha sido brutal", confiesa Nerea sobre el momento.
La disciplina más técnica
La obediencia deportiva es, según Nerea, una de las disciplinas caninas más complicadas por su enorme exigencia técnica. A diferencia del Agility, no se trata de un circuito de obstáculos, sino de ejecutar una serie de ejercicios reglamentados con una precisión milimétrica y un margen de error mínimo. De hecho, un amigo competidor resume así su complejidad: "Nerea, tú siempre que tengas la duda de si penaliza, penaliza".

Aire en un momento de la competición
Los ejercicios incluyen el "junto", donde el perro debe caminar al lado del guía de forma recta, sin tocarlo y variando el ritmo, o realizar desplazamientos complejos. Aire ha demostrado ser una alumna "superresolutiva" que no solo entiende y ubica los ejercicios rápidamente, sino que además "le encanta" realizarlos.
Una nueva misión: el bienestar de los mayores
Tras su éxito en la competición, el carácter sociable de Aire ha abierto una nueva puerta: las terapias asistidas con animales. Gracias a un programa en centros de mayores de Alcoy, la campeona ayuda a los residentes a mejorar su día a día. Actividades tan sencillas como peinarla o darle de comer en el suelo les permiten recuperar movilidad y trabajar funciones cognitivas que han podido perder.
El feedback de la experiencia es "brutal" e "increíble", según Nerea. Los directores de los centros confirman que el taller con Aire es el de mayor afluencia, ya que todo fluye de manera "natural y divertida". Lo más destacado es que fomenta la cooperación y la comunicación, ayudando a crear vínculos entre personas que a menudo sufren de soledad. Nerea destaca que gracias a la perra, los mayores "empiezan a hablar entre ellos".
Los mayores empiezan a hablar entre ellos"
Cuidadora de Aire
Aire no está sola en esta misión. La acompañan Jack y Sucre, otros dos perros que, según su dueña, "han nacido para hacer esto". Para ellos, es el "momento más feliz de la semana". El programa, que ya ha completado 10 de las 36 sesiones previstas, sigue llevando alegría y bienestar a los mayores de la comarca.
Este contenido ha sido creado por el equipo editorial con la asistencia de herramientas de IA.




