Estamos en un momento clave en el Valencia CF. Hemos entrado en la última semana de competición y el equipo, a falta de una jornada para el cierre del campeonato, todavía no está matemáticamente salvado. El domingo en el Benito Villamarín estará en juego la permanencia en Primera División. Si puntúa, no hará falta mirar hacia otros campos.

El vestuario lo tiene en su mano para terminar con esta pesadilla y, aunque se logre, la temporada del Valencia CF habrá sido un absoluto fracaso. También son conscientes de ello en el seno del club. A partir del próximo lunes, tocará hacer una reflexión profunda a nivel interno para analizar los errores cometidos y tratar de enderezar el rumbo de una nave que lleva varias campañas dando tumbos y a la deriva. Empezando por la elección del líder del grupo.

En este sentido y, según ha podido saber la Cadena COPE, Baraja es la opción. El Valencia CF está decidido a apostar por la continuidad de Rubén Baraja al frente del equipo. El técnico pucelano llegó en uno de los momentos más delicados que se recuerda en la historia reciente del club. Hundido en la tabla, sin fichajes en el mercado de invierno y con un vestuario muy golpeado en lo anímico. Harta de la situación, la afición vio en Baraja el último clavo ardiendo al que agarrarse. Una figura que, a pesar de su inexperiencia en la máxima categoría, transmitía respeto por el futbolista que fue y un sentimiento de pertenencia y conocimiento del club, escaso en los últimos tiempos. Si alguien tenía que salvar al Valencia, debía ser él.

A un paso de lograr el objetivo que se le encomendó, Baraja se ha convertido en el mejor embajador del club dentro y fuera del terreno de juego. De menos a más, ha logrado revertir la dramática situación en la clasificación y ha conectado de nuevo a la grada con los jugadores. Sus números y sus decisiones, así lo avalan.

Desde la llegada de Baraja al banquillo, el equipo ha sumado 21 puntos de 48 posibles. Cuando tomó las riendas del equipo, el Valencia CF ocupaba puestos de descenso, a un punto de la salvación. En una clasificación de LaLiga en la que se contabilizara los puntos desde su llegada (jornada 22) el Valencia sería 10º.

Y hay algo más. Baraja no ha tenido reparos en mirar a la cantera y apostar por jóvenes que estaban actuando en 2ªRFEF. Javi Guerra, Diego López y Alberto Marí han llegado al primer equipo para quedarse. Cuando peor estaba la situación, al técnico pucelano no le tembló el pulso para apostar por los canteranos. Y, pase lo que pase, ese será el legado más valioso que deja una temporada para el olvido; patrimonio del club.

Por todo ello, la entidad de Mestalla está decidida a apostar por Baraja para que sea su entrenador la próxima campaña. A la espera de lo que suceda en Sevilla el próximo domingo, el club tiene la intención de sentarse en las próximas semanas a hablar con su representante para empezar la negociación, con la voluntad de llegar a un acuerdo que amplíe su vinculación.

Por su parte, el entorno del entrenador se mantiene cauto. Confirma a COPE que todavía no ha habido conversación en ese sentido con el club y que, una vez terminada la competición, se reunirá con Baraja para analizar su futuro. La predisposición es buena y escucharán lo que tenga que ofrecerles el Valencia. El técnico che ya apostó en el momento más delicado y ahora, afrontará la negociación en busca de un proyecto en el club de su vida.

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