José Luis Gayà ha acaparado los focos de la actualidad valencianista en las últimas horas. En el tramo final del Trofeo Taronja disputado ante el Milan en Mestalla, Krunic realizó una entrada fea, a destiempo, clavándole los tacos a la altura del gemelo al de Pedreguer, que tuvo que abandonar el campo visiblemente dolorido. Finalmente, Gayà no está lesionado y estará listo para la primera jornada de liga la próxima semana.

Es la noticia más positiva que deja el encuentro más allá de la victoria por penaltis y las buenas sensaciones. En rueda de prensa, Bordalás ya mandó un mensaje tranquilizador, alegando que, afortunadamente, el fuerte golpe se quedaba en un susto. “En el vestuario hemos visto que estaba mejor”, explicó. Una vez realizadas las pruebas pertinentes sobre el futbolista, todo apunta a que no tendrá problemas para disputar con normalidad los próximos partidos, aunque podría descansar en el último amistoso de pretemporada el próximo sábado ante el Brentford para no forzar antes del debut liguero, que es dentro de apenas ocho días.

Gayà está llamado a ser uno de los pilares del nuevo proyecto che, que necesita a sus piezas clave para empezar a sembrar una buena dinámica desde el comienzo, ante la falta de fichajes. Precisamente de esto último también habló Bordalás tras la conclusión del Taronja, consciente de la situación que atraviesa el club pero con las ideas claras en cuanto a las necesidades del equipo: hacen falta llegadas. “Quedan pocas fechas para el comienzo, y estamos en contacto presidente y dirección deportiva todos los días para que los refuerzos en puestos específicos e importantes lleguen lo antes posible. Ahora mismo, el mediocentro es una necesidad muy importante para el equipo”.