De chalet familiar a narcolaboratorio: así defraudaban luz equivalente a 50 casas para cultivar marihuana en Busot

Lo que parecía una tranquila vivienda unifamiliar de tres plantas en una zona residencial escondía una auténtica fábrica de marihuana camuflada entre muros falsos y ventanas tapiadas. La Guardia Civil, en el marco de la operación “Legar”, ha desmantelado una sofisticada plantación en el interior del inmueble, cuyo consumo energético equivalía al de 50 viviendas.

Los agentes del Área de Investigación de San Vicente del Raspeig comenzaron a seguir la pista en agosto de 2024, alertados por vecinos que oían constantes ruidos eléctricos y notaban movimientos extraños. La casa, de unos 400 m², estaba alquilada por una pareja serbia que pagaba en efectivo y mantenía el suministro eléctrico a nombre de la propietaria original.

La redada se realizó el pasado 1 de abril. Dentro, encontraron 481 plantas de marihuana adultas en su última fase de floración, maquinaria especializada, sistemas eléctricos de alto rendimiento y todo un sistema de cultivo oculto mediante obras en el interior de la vivienda: agujeros en forjados, tabiques manipulados, e incluso un enganche ilegal y soterrado a la red eléctrica que, según técnicos, suponía un grave riesgo de incendio.

El laboratorio contaba con tecnología valorada en más de 18.000 euros: pantallas LED, filtros antiolor, sistemas de ósmosis y fertilizantes diseñados para maximizar el rendimiento de la droga.

El fraude eléctrico, que superaba los 80.000 vatios, ha supuesto un grave perjuicio a la red energética y se ha valorado como equivalente al consumo de medio centenar de viviendas similares.

Los detenidos, que residían allí junto a su hijo menor, han ingresado en prisión provisional por delitos de tráfico de drogas, defraudación de fluido eléctrico, cultivo y pertenencia a organización criminal.