Los coches conectados se han convertido en símbolos tecnológicos de la era digital sobre ruedas. Mientras nos maravillamos con las ventajas de tener vehículos que se comunican con otros dispositivos, existe un lado oculto que merece nuestra atención: la privacidad.

El hecho de que los coches estén conectados los catapulta de medio de transporte a 'dispositivo de movilidad'. Sean autónomos o con conductor, los coches conectados están rellenos de microprocesadores y sensores que registran información del vehículo y de los pasajeros constantemente.

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¿Qué dicen los datos?

La expansión y el perfeccionamiento constante de las redes móviles han convertido la conectividad en un componente intrínseco de nuestro día a día, también en las carreteras.

En la actualidad, se estima que circulan alrededor de 400 millones de coches conectados a nivel global. Una cifra que, aunque aún distante de conformar la mayoría, está destinada a incrementarse en los próximos años.

Las previsiones señalan que el mercado de estos vehículos en Europa experimentará un crecimiento anual del 16,9% entre 2023 y 2028.

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¿Presentan estos coches inconvenientes?

Actualmente, los coches son capaces de registrar el comportamiento de los frenos, asistir al estacionamiento o avisar si nos salimos del carril. Pronto, sin embargo, a las métricas mecánicas se sumará la información personal: quiénes somos, cómo y cuándo conducimos, las características de los pasajeros y nuestros trayectos habituales.

Dentro de poco estará autorizado circular concoches automáticos por nuestras carreteras, es decir, coches conectados que tienen una cierta autonomía para auto conducirse. Para saber donde está el límite entre la conectividad y la privacidad entrevistaremos al profesor y colaborador de losEstudios de Derecho y Ciencia Política de la UOC, EduardBlasi.

(ESCUCHA AQUÍ LA ENTREVISTA A EDUARD BLASI, PROFESOR DE LA UOC)

- ¿Dónde está el límite?

Los coches conectados son parte de la evolución, como por ejemplo en su momento fueron los televisores inteligentes, las cosas cada vez se convierten más inteligentes y de eso se trata con el internet en las cosas. Cómo te comentaba, los coches conectados son parte de la evolución tecnológica en la sociedad.

La tecnología nos trae cosas muy buenas, nos permitirá evitar accidentes, ser mucho más ágiles, pero como has comentado antes, hay un punto importante que es la recopilación de datos y estamos hablando de grandes cantidades, y son datos de un entorno muy privado como es por ejemplo el interior de nuestro coche y aquí está el problema en como se custodia esta información, cómo se tratan estos datos y sobre todo cuál es su uso. La tecnología en sí no es mala, el problema es el mal uso que se hacen de ella.

- ¿Todo lo que suceda dentro del coche también tendrá una conectividad determinada?

Tendría que haber una serie de parámetros implementados por defecto que nos pudieran garantizar una protección desde el minuto cero. Recomiendo que se revise todo antes de aceptar nada.