Ahorrar para las vacaciones del año que viene: Un reto no tan difícil si aplicas alguno de estos métodos
Septiembre es un buen mes para poner en marcha algún reto de ahorro que nos permita llegar al verano del 2026 con un rinconcito pensado para los viajes

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Barcelona - Publicado el
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Cuando comienza el mes de septiembre, la mayoría dejamos las vacaciones atrás y empezamos a pensar en las del próximo año. Es ahí donde surge el debate de a qué tipo de vacaciones aspirar: empezamos pensando en un viaje grande y como vemos que aún tenemos muchos meses por delante, lo dejamos estar. Después conforme se va acercando empezamos a pensar en ahorrar una cantidad de dinero el mes previo al viaje, y llega un momento en que no tenemos suficiente y optamos por planes más sencillos por falta de presupuesto con la idea de poder hacerlo "el año que viene". Y así todos los años.
Pues ahora bien, este mes de septiembre es un buen momento para poner en marcha algún reto de ahorro que nos permita llegar al verano del 2026 con un rinconcito pensado para los viajes y no es tan difícil como parece. La asociación de usuarios ASUFIN ha recogido los más populares y su experto económico, Antonio Gallardo, nos ha dado todos los detalles.
el desafío de las 52 semanas
Contando que cada año tiene 52 semanas, este reto consiste en ahorrar cada semana un euro más que la anterior. Es decir, empezar con 1 € y acabar con 52€, por lo que quedaría así: la primera semana 1 euro, la segunda 2 euros, la tercera 3 euros, y así hasta llegar al objetivo final. De este modo, si se sigue la lógica y se alcanzan las 52 semanas, el ahorro acabará siendo considerable y al final se habrán conseguido 1.378 euros.

Billetes
el método del redondeo
Para quienes aún pagan las compras en efectivo, la asociación de consumidores propone el método del redondeo que consiste en guardar el cambio de las compras hasta redondear el euro. Un método que trata de dar protagonismo a la chatarra para acabar viendo el valor que puede tener cuando se acumula. Así, en una compra de 14,12 euros, se ahorrarían 88 céntimos que podrían ir a una hucha o algo similar. Una cantidad, a priori, es escasa, pero que si se hace con todas las compras y de forma regular, al cabo de un año puede acabar financiando algún billete de avión.
la regla del 30/50/20
Este es un reto difícil de cumplir para la gente que vive en ciudades como Barcelona, con un precio de la vivienda desorbitada, pero en este caso se trata de perseguir tres objetivos: No destinar más de un 30 % de los ingresos a la vivienda (ya sea vivienda o alquiler), limitar a un 50 % los gastos fijos y variables (ropa, comida, ocio, material, suministros, seguros, extraescolares…) i conseguir ahorrar un 20 % de los ingresos familiares cada mes para poder hacer frente a imprevistos y hacer hucha.
La simulación en el caso de una hipotética familia con dos personas trabajando y cobrando cada una el salario mínimo interprofesional de 1.184 euros mensuales sería la siguiente: La vivienda debería rondar los 710 euros como mucho al mes, los gastos fijos y variables podrían ser de unos 1.184 euros al mes y el ahorro ideal sería ahorrar unos 470 euros al mes. Si esto se consiguiera, en 12 meses el ahorro acabaría siendo superior a los 5.600 euros.
Por lo tanto, hablamos de métodos de ahorro efectivos, que han evolucionado significativamente llevando a la gente a tener una mayor conciencia financiera. Hoy en día, existen múltiples opciones para empezar a hacerlo y, además, el acceso a la educación financiera permite a más personas tomar decisiones informadas sobre cómo y dónde ahorrar, adaptando las estrategias a sus objetivos personales y estilo de vida. Pero no obstante, en la actualidad, los métodos de ahorro continúan basándose en principios fundamentales: la disciplina, la constancia y la planificación. El hábito de separar una parte del ingreso para el futuro sigue siendo una de las prácticas más efectivas para lograr estabilidad económica, enfrentar imprevistos y alcanzar metas personales.