Recientemente, se cumplía un año del primer ingreso por Covid-19 en Castilla y León. Fue en Segovia, como respuesta preventiva tras la confirmación del positivo de un joven italiano, estudiante del IE University. Un año después desde el Colegio de Médicos se aborda ahora el tema de las secuelas, con 12 meses de margen para observar la evolución de la enfermedad. El doctor Gracialiano Estrada es neumólogo del Hospital General y desde el pasado 3 de marzo ostenta la presidencia (que será efectivo tras el período de alegaciones) del Colegio de Médicos de Segovia. Estrada, quien toma el relevo de Enrique Guilabert, es además presidente de los neumólogos de Castilla y León y de la Sociedad Castellano-Leonesa y Cántabra de Patología Respiratoria (SOCALPAR).

Este neumólogo sostiene que “en general, los pacientes se van recuperando bien”, con un porcentaje pequeño de secuelas. Unas complicaciones que se mantienen tras superar la enfermedad como consecuencia del elevado número de neumonías que ha provocado este coronavirus, ya que “en Segovia se han contabilizado unas 1.500 neumonías, cuando en un año normal suelen ser unas 300”. El nuevo presidente estará acompañado en la cúpula por un buen número directivos de la anterior etapa de Enrique Guilabert, con nombres como Marina de la Infanta, (vicepresidenta primera), Concepción Manrique, (secretaria), Francisco Javier García (vicesecretario) y Rafael Sanz, (tesorero). El puesto de vicepresidente segundo que ocupaba anteriormente Estrada lo recibe ahora María Cornide.

Abordar los problemas derivados de la covid le lleva a recordar síntomas que prevalecen en el enfermo tiempo después, tales como “falta de aire y cansancio o fatiga”, así como “alteraciones aspirométricas”, sin olvidar otras características que arrastran los pacientes como “la elevada frecuencia cardíaca con el ejercicio y la pérdida de gusto u olfato”, que en algunos casos mantienen hasta un año después.

Como presidente de los neumólogos de Castilla y León, Estrada entiende que una de las enseñanzas que deja la pandemia a los profesionales es la mejora que obtiene el paciente hospitalizado por covid al ser sometido a terapias ventilatorias no invasivas, “lo que ha sido muy importante tanto para reducir los ingresos en cuidados paliativos como para evitar en muchas ocasiones la intubación”, siempre que el paciente responda bien a este proceso. Los porcentajes muestran que “entre un 60 y un 70% de pacientes que se someten a estas terapias evitan las UCIS”, guarismos que se hacen extensibles y homologables a otras provincias y otros centros hospitalarios del país.

En la misma línea de destacar procedimientos médicos que se han revalorado durante esta pandemia, Graciliano Estrada rescata la importancia para los neumólogos de la exploración funcional en el estudio de las secuelas. “La aspirometría nos hace ver la capacidad pulmonar del paciente de una forma muy objetiva, se convierte en un indicador muy importante. Todos los pacientes afectados que hayan tenido neumonía por covid y en los que persistan síntomas, deberían hacerse una exploración funcional”, recomienda.

Cepas más contagiosas

El perfil del paciente que ingresa ahora en un hospital por covid ha cambiado con respecto a los primeros infectados de hace un año. “Tenemos datos de nuestras sociedades científicas y nos confirman que ahora los pacientes son más jóvenes y, probablemente, con cuadros más graves, lo que obliga a una mayor atención para evitar la UCI”, resume Gracialiano Estrada, para quien el descenso en la media de edad responde, por un lado a “las mejoras producidas en las residencias y al proceso de vacunación en este segmento de población” y, por otro, a la propia naturaleza del virus. “Hay más presencia de la cepa británica de la que, si bien hay dudas de que sea más mortal, desde luego lo que sí es seguro es que es más contagiosa”. Reflexiones que se plasman en el detalle de que en esta ocasión se haya dado el contagio “de familias enteras y con ingresos de varios miembros” de forma más habitual, circunstancia que les lleva a buscar como causas tanto los contactos sociales que se multiplicaron durante las Navidades como la mayor índice de contagio de las nuevas variantes.

En cuanto a las cepas que han ido apareciendo, el nuevo presidente de los médicos segovianos tira de datos para recordar que en Castilla y León se han identificado “dos casos correspondientes a la variante sudafricana mientras que, aproximadamente un 10 ó un 15% de los infectados en la comunidad lo son por la cepa británica”. En cualquier caso, los análisis y las cifras se van actualizando día a día y ver la efectividad de las vacunas llevará un tiempo. Precisamente sobre este asunto de la vacunación, cree que el ritmo más lento de inmunización que atraviesa nuestro país se debe a un tema de la capacidad de contar con estos medicamentos: “Creo que hay un problema de abastecimiento, porque a mi entender existe una buena red del sistema nacional de salud para poner vacunas, pero el problema es de remesas”, analiza.

Sumamos varias semanas de descensos tanto en el número de contagiados como en los ingresos en planta en las UCIs, lo que confirma el declive de la tercera ola. “Todavía quedan unos días con pacientes graves en UCI, que suelen ser los que posteriormente pueden arrastrar más secuelas”, confirma Estrada. Para este neumólogo, Segovia ha sido “tremendamente castigada” y los profesionales médicos han vivido con mucha presión “cosas que nunca imaginaríamos tener que vivir”, por lo que hace un llamamiento a toda la población a seguir cumpliendo escrupulosamente las medidas higiénico-sanitarias para evitar contagios. “Es muy importante que nos hagamos a la idea de que la pandemia no ha pasado. Hay que seguir estando alertas, con un cumplimiento riguroso de todas las normas. La mascarilla, la higiene, la ventilación y las restricciones en accesos y distancia social son fundamentales”, concluye.