Los ganaderos de la zona de Ledesma han mostrado su preocupación y sus quejas por el funcionamiento de la Unidad Veterinaria de la comarca. Los problemas son diversos desde falta de personal hasta las colas.

Estos afectados denuncian que no hay administrativos por las mañanas, cuando más necesitan este servicio, y cuando los hay se producen largas colas ya que se amontona el trabajo. Las colas ahora mismo son un gran problema, las aglomeraciones son un punto de infección de la pandemia. A estos dos problemas también se suma la pérdida de documentación sobre algunos animales. Juan Luis Martín Sevillano, presidente de la asociación 19 de abril para Cope explica que muchas veces incluso se pierden los papeles y el registro no funciona.

De un tiempo a esta parte han pasado a ser habituales los problemas con los que se encuentran los ganaderos al realizar trámites y gestiones, en algunas ocasiones incluso, se han ido sin poder realizarlos y han tenido que volver otro día.No hay administrativos por las mañanas para atender al público y los veterinarios se ven desbordados ante la eliminación de una plaza y una baja. El funcionamiento del registro es caótico, se han producido errores que pueden tener consecuencias graves para los propios usuarios, desde registros mal realizados hasta pérdida de documentación, hay largas colas y esperas. Los principales perjudicados del deficiente funcionamiento son los ganaderos pero no los únicos, los trabajadores también padecen las carencias e inconvenientes de la realización de un trabajo en unas condiciones precarias que no son las óptimas.

Ante este caso, los propios ganaderos han presentado un escrito en la delegación de ganadería de la junta para intentar subsanar estas deficiencias cuanto antes. Estos problemas no se quedan en los ganaderos, sino que los propios trabajadores también sufren carencias e inconvenientes para realizar su trabajo. Nunca hay que dejar de lado al campo y menos en un momento de pandemia como en el que estamos inmersos.