Hoy lunes día 5 la Diócesis celebra la solemnidad del patrono principal, San Froilán, con una eucaristía que presidirá el obispo Julián López a las 12,00 horas en la Catedral con aforo limitado para cumplir con las restricciones indicadas por la autoridad sanitaria. Una misa estacional que tradicionalmente se celebra en horario vespertino en la Basílica de la Virgen del Camino, pero que este año se traslada al horario matinal después de que la Diócesis, de común acuerdo con la comunidad de los PP. Dominicos, encargados del cuidado de la Basílica de la Virgen del Camino, la Diputación, el Ayuntamiento de León y los ayuntamientos del Voto (Valdefresno,Villaturiel y Valverde de la Virgen) , decidieran suspender la solemne celebración que cada año, al mediodía, acoge la Basílica en el marco de la popular romería, también suspendida en esta edición por efecto de la pandemia del Covid-19.

A lo largo de esta última semana, los organizadores ya habían suspendido la eucaristía que iba a presidir el obispo Julián López en la Catedral a partir de las 18 horas, que finalmente se llevará a cabo a las 12 horas del mediodía. También se canceló la tradicional romería popular, en la que miles de personas acompañan en procesión la imagen del Santo desde León hasta el santuario de la Virgen del Camino. Tampoco tendrán lugar este año otras tradiciones asociadas a esta jornada festiva, como el desfile de pendones históricos y carros engalanados.

FUNDADOR DE MONASTERIOS, OBISPO DE LEÓN

El santoral anota que San Froilán nació en los arrabales de Lugo en el año 833 y que a los dieciocho años dejó la casa de sus padres para emprender vida de ermitaño, inicialmente en El Bierzo y más adelante en las montañas leonesas del Curueño. Impulsó el desarrollo de la vida monástica con iniciativas como la fundación en tierras zamoranas de los monasterios de Tábara y Moreruela de Tábara, donde desempeña el oficio de abad. En el año 900, vacante la sede episcopal legionense, el pueblo de León pide al Rey Alfonso III que le conceda por obispo al Abad Froilán y en el día de Pentecostés de ese año 900 Froilán es ordenado obispo. En el año 905, tras un fecundo lustro de ejercicio episcopal, con dedicación especial a la reforma de los sacerdotes, monjas y seglares, fallece y es enterrado en la Catedral y en el año 916 sus reliquias, por orden del Rey Ordoño II, son trasladas a la nueva Catedral. Parte de sus reliquias descasan a día de hoy bajo el altar mayor del primer templo diocesano.