La empresa albaceteña de cascos inteligentes Livall Europe ha presentado sus nuevos dispositivos enfocados a mejorar la prevención y la seguridad de los empleados que trabajan en la recogida de residuos.

Según ha explicado el CEO de la compañía, Manu Marín, se trata de un casco que, además de incorporar tecnología de seguimiento y alerta en caso de 'SOS', utiliza sensores que recogen y aportan datos de polución, calidad del aire o temperatura ambiental.

"Con esta información se pueden elaborar protocolos para, por ejemplo, prevenir golpes de calor", ha destacado Marín.

La iniciativa surge tras el éxito de sus cascos inteligentes para una movilidad segura, con los que, asegura, ya han salvado hasta cinco vidas en Europa. "Ha sido gente que le ha dado un infarto y que gracias a una de las funciones del casco pues se ha detectado a tiempo y dado el aviso, o personas que se han perdido en medio de la montaña o han tenido un accidente y han podido ser localizadas", ha detallado.

Para ello, los cascos incluyen tres niveles de seguridad, el primero, y más visible ante el tráfico, son las luces de frenada e intermitentes. El segundo, el manos libres, para que los conductores puedan atender llamadas sin soltar el manillar y, por último, la tecnología "patentada a nivel mundial", el 'SOS'.

"Esto sirve para que en caso de que haya una caída y el conductor quede inconsciente, el casco de forma autónoma manda la posición a tus contactos o a la empresa de seguros para que puedan ir a auxiliarle", ha dicho.

Para ello, el dispositivo incluye unos sensores con acelerómetros que detectan la caída y, en caso de no producirse ningún movimiento por parte del usuario, el casco inicia una cuenta de 90 segundos, al finalizar, si no ha sido cancelada por el conductor, envía el aviso.

"Llevamos con esta tecnología ya tres años en el mercado, una vez que hemos demostrado que salvamos vidas ha sido cuando hemos tomado la decisión de pasar al siguiente segmento, la industria, siguiendo la misma filosofía, la seguridad activa y preventiva de los operarios", ha indicado Marín.

Así es como han empezado con proyectos piloto en empresas de segmento de recogida de residuos. "Son trabajadores que van encima del camión a velocidades altas, con nuestros cascos se mejora la seguridad de estos empleados", ha aseverado.

Manuel Serrano apoya el futuro de estos cascos inteligentes

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El alcalde de Albacete, Manuel Serrano, ha reiterado el apoyo del Ayuntamiento a las empresas que procuren “futuro, riqueza y empleo en calidad a la ciudad”, como por ejemplo Livall, dedicada al diseño, fabricación y distribución de cascos inteligentes cuyas instalaciones ha visitado esta mañana en el Polígono Industrial Romica junto al concejal de Movilidad, Francisco Navarro, y la concejala de Empleo y Promoción Económica, Lucrecia Rodríguez de Vera.

Manuel Serrano ha agradecido al fundador y CEO de Livall, Manuel Marín, y a todo su equipo, su apuesta inequívoca por Albacete, destacando lo importante que resulta contar en nuestra ciudad con una empresa tecnológica de estas características, que distribuye a más de 70 países, ya que los cascos inteligentes que fabrica “mejoran la seguridad vial y potencian una movilidad más segura, eficiente y sostenible”.

En opinión del alcalde, es un orgullo contar en Albacete con una empresa tan punteras como Livall que fomenta el uso del transporte sostenible a través de la innovación tecnológica en materia de seguridad y conectividad, al tiempo que favorece la captación de empresas y la generación de sinergias.

Manuel Serrano ha puesto en valor los cascos inteligentes que fabrica Livall, los cuales cuentan con diferentes líneas para uso urbano, carretera, montaña, esquí y motocicleta, señalando que “suponen un elemento imprescindible en el avance de la seguridad vial por la tecnología reactiva y preventiva que incorpora para prevenir lesiones y evitar accidentes”.